Nala, la hija de nueve meses de Elena Furiase, ha tenido que ser hospitalizada: "Gracias a Dios por haberla curado"

Nala, la hija de nueve meses de Elena Furiase, ha tenido que ser ingresada. Así lo han contado tanto la actriz como su madre, Lolita Flores, a través de sus respectivos perfiles de Instagram, desde donde han roto su silencio después de cinco intensos días en los que se han volcado en la salud de la pequeña del clan.

La primera en informar de la difícil semana que han pasado en el hospital ha sido la propia Elena. Lo ha hecho a través de un tierno post en el que, además de enseñarnos cómo su bebé duerme plácidamente sobre su pecho, explica el "pequeño susto" que "gracias al Señor" han superado. Con el fin de no asustar a sus seguidores, que se han alegrado de que finalmente no haya sido "nada grave", la actriz simplemente ha narrado una escena cotidiana (y muy amorosa) que vivió cuando se encontraban en la clínica.

"En la cama, mi niña había conseguido conciliar el sueño y, pegadita a mí, respiraba profundo y tranquila. Hacía más de seis horas que no tenía fiebre y eso era un triunfo, al menos para nosotras. Su cuerpo le estaba dando tregua y descanso, y mi niña lo aprovechaba", ha contado en esta publicación. En ese momento, una enfermera entró a chequear que todo estaba bien, "se asomó y rio al verla dormir tan plácidamente".

La angustia de Lolita Flores por la salud de su nieta Nala

Ha sido Lolita la que nos ha hecho ver que la situación ha sido más delicada de lo que pensábamos. "Perdonad si no he cogido llamadas ni whatsapps. Había algo mucho más importante: mi nieta Nala, mi hija y mi nieto, que ha estado conmigo el fin de semana mientras sus padres se turnaban entre el trabajo y la clínica", ha explicado, pidiendo así disculpas a los muchos amigos y compañeros que han estado preocupados por ella estos últimos días.

Quiero darle las gracias a Dios infinitamente por haberla curado, a mis tres ángeles del cielo (se refiere a sus padres, Lola Flores y El Pescaílla, y a su hermano Antonio) y a los médicos y enfermeras

"Quiero darle las gracias a Dios infinitamente por haberla curado, a mis tres ángeles del cielo (se refiere a sus padres, Lola Flores y El Pescaílla, y a su hermano Antonio) y a los médicos y enfermeras del Hospital San Rafael", ha manifestado. Por suerte, "la doble angustia" que tenía por sus "niñas", su hija y su nieta, "ya ha pasado".

Este complicado episodio ha hecho que Lolita Flores se acuerde de todas las abuelas, madres, padres y demás familias que "están aún con algún peque en clínicas", como les ha tocado vivir a ellos esta semana. Unas palabras a las que se ha sumado la propia Furiase que, después de cinco días "igual de juntas, igual de abrazadas" que como las vemos en la foto, por fin disfrutan de la tranquilidad de haber recibido, pero en casa.