Diez básicos que no pueden faltar en la bolsa de maternidad del hospital

  • Se acerca el momento del parto y tienes que preparar la bolsa para ir al hospital.

  • Te contamos cuáles son las cosas imprescindibles para ti y para tu bebe a su llegada al mundo.

Se acerca el momento que tanto esperabas, el nacimiento del bebé, y por lo tanto de preparar la bolsa para el hospital con todo lo necesario. Es a partir de la semana 37 de embarazo cuando se recomienda tenerla a punto, porque se considera que el embarazo ha llegado a término. Para que sepas lo que tienes que meter en ella, y ni te sobre ni te falte nada, te hemos preparado la lista con los diez imprescindibles para ti y para tu bebé.

Para la madre

  • Camisón: una vez que llegues a tu habitación, tras el parto, lo más cómodo es que lleves tu propio camisón (no el del hospital). Pon dos en tu maleta, para tener uno de repuesto, y asegúrate de que tenga abertura delantera con botones, para facilitar la lactancia. Descarta los pijamas de dos piezas, porque son muy incómodos para que te puedan hacer las revisiones necesarias y para que te puedas asear e ir al baño.
  • Bata: es posible que no estés acostumbrada a usarla, pero en el hospital te va a resultar imprescindible para levantarte de la cama y no coger frío si hay cambio de temperatura. Además, te ayudará a sentirte más vestida en el caso de recibir visitas.
  • Sujetador de lactancia: si vas a dar el pecho a tu bebé, necesitas un sujetador de lactancia, asegúrate de tener un par que te resulten cómodos y cuenta con que es posible que el pecho aumente algo de tamaño cuando se produzca la subida de la leche tras el parto.
  • Bragas de algodón o de papel: tú decides si quieres que las bragas sean deshechables o te resulta más cómodo lavarlas después pero que sean de algodón. Lo más importante es que sean cómodas y de talle alto, por encima de la cintura, para que no te rocen la cicatriz en el caso de que te practiquen una cesárea.
  • Zapatillas: lo último que te va a apetecer es utilizar el calzado con el que llegaste al hospital para moverte por la habitáción. Un par de zapatillas de estar en casa que te sean cómodas y que ocupen poco espacio son lo que necesitas para comenzar a caminar tras el parto.
  • Compresas postparto: este tipo de compresas, especiales para este momento, te las proporciona el hospital, pero como luego segurirás utilizándolas en casa, no está de más que te lleves tú alguna para tener siempre a mano por si la necesitas.
  • Crema antigrietas: durante los primeros días de lactancia es habitual sentir molestias en los pezones. Una crema específica que alivie la irritación que se puede producir en la piel de estos te será de gran utilidad.
  • Neceser: piensa en todo lo imprescindible para ti la hora de darte una ducha (gel, crema, champú) y para cuidar tu cara (hidratante, cacao para los labios…). También puedes incluir tus básicos de maquillaje, pero no te recomendamos llevar perfume para que el bebé pueda reconocer tu olor corporal.
  • Ropa para salir del hospital: piensa en algo cómodo y realista. No vas a salir con una tripa de 9 meses, pero tampoco como antes del embarazo, así que piensa en algo que te vayas a poder poner sin problemas.
  • Documentación: prepara una carpeta con tu DNI, plan de parto si lo tuvieras, tarjeta de la seguridad social y toda la documentación del embarazo.

Para el bebé

  • Pijamas: los bebés se manchan con mucha facilidad, así que cuenta con 3 o 4 pijamitas para que puedas cambiarle sin problemas.
  • Bodies: los manchan aún más que los pijamas, porque son frecuentes los escapes del pañal, sobre todo en los primeros días. Que no te parezca exagerado llevar unos 6, ya que lo más posible es que los utilices.
  • Pañales: al igual que ocurre con las compresas postparto, lo habitual es que te los proporcione el hospital, pero como en casa ya tendrás preparados los pañales de la talla 0, incluye unas cuantas unidades en tu maleta.
  • Gorritos: se recomienda su uso porque es por la cabeza por donde los bebés pierden más calor corporal. Con 2 será suficiente, porque es difícil que se manchen.
  • Patucos: o calcetines elásticos. Con dos pares podrás mantener sus pies calentitos.
  • Muselinas y gasas: ligeras y transpirables, te servirán tanto para limpiar al bebé como para arrullarle. Las más suaves, pensando en la delicada piel del recién nacido, son las de algodón orgánico.
  • Mantita o arrullo: para abrigarle para sus paseos por la habitación o para volver a casa y será de las cosas que más utilices durante las primeras semanas de vida.
  • Neceser: necesitas toallitas húmedas, esponja natural, cepillo de pelos blanditos, colonia sin alcohol, jabón y pomada para el pañal.
  • Ropita para cuando salga: conocida como la “primera puesta”, es la ropa con la que va a salir del hospital y que seguramente has elegido con todo el cariño.
  • ¿Y el chupete y las manoplas?: el uso del chupete en los recién nacidos genera bastante controversia, pero parece que predomina la idea de que en las primeras semanas no son necesarios y pueden interferir en el proceso de lactancia. Las manoplas eran otro de los básicos en la bolsa de hospital, para que los bebés no se arañasen la cara con sus uñitas, pero a día de hoy se aconseja limarlas y que puedan mantener esa parte del cuerpo en contacto con la piel de la madre porque es muy beneficioso para ellos.