Congelar óvulos es cada vez más popular: cinco mil euros y centros con planes de financiación

  • Congelar óvulos es una opción cada vez más popular entre mujeres mayores de 30 años

  • Repasamos las dudas más comunes sobre en qué consiste y cuánto cuesta

En las últimas dos décadas la edad para ser madre se ha retrasado de manera significativa por lo que la congelación de óvulos es cada vez más popular. Si en los años 80, la edad media de las madres primerizas estaba en los 25 años (y apenas un 1% de la población femenina tenía a su primer hijo pasados los 40), la edad media para ser madre hoy ya supera los 30 años, según la última Encuesta de Fecundidad publicada por el INE (Instituto Nacional de Estadística).

Los tiempos han cambiado y, a día de hoy, conciliar la vida profesional y la familiar sigue resultando complicado para la gran mayoría. Si a esto unimos la falta de estabilidad económica que impera en la sociedad actual es fácil entender que la maternidad se postergue. Retrasar la edad para lograr un embarazo además, implica, entre otras cosas, que las mujeres tienen menos hijos de los deseados. Uno de los motivos es que a medida que aumenta nuestra edad disminuyen, en un alto porcentaje, los deseos de ser madre, según la encuesta del INE. El otro, de gran peso, es que la reserva ovárica se reduce tanto en cantidad como en calidad con el paso de los años.

Por esto último, congelar óvulos es una opción que gana popularidad entre las mujeres que no planean tener hijos hasta bien pasada la treintena, aunque la edad no es el único motivo: también lo hacen algunas mujeres antes de someterse un tratamiento invasivo como quimioterapia o radioterapia, o si se nos ha detectado una enfermedad autoinmune que pudiera afectar a la fertilidad.

¿En qué consiste la congelación de óvulos o vitrificación?

Para congelar óvulos o, lo que es lo mismo, llevar a cabo un proceso de vitrificación en primer lugar hay que realizar una estimulación ovárica que permita aumentar el número de óvulos que se obtienen en cada ciclo. Cuando, mediante las pertinentes ecografías de control, se estima que ya se ha alcanzado el número deseado se realiza una punción transvaginal y se procede a la congelación. Está punción implica el paso por quirófano y la sedación de la paciente. Una vez que los óvulos han sido congelados pueden permanecer así indefinidamente, ya que su calidad no se deteriora con el paso del tiempo.

Para contar con buenas posibilidades de conseguir un embarazo en el futuro es necesario haber congelado unos 25-30 óvulos. Teniendo en cuenta que en un ciclo de vitrificación se obtienen entre 8 y 10 óvulos maduros, se suele recomendar realizar 2 o 3 ciclos de congelación. En cualquier caso, en el análisis hormonal que se realiza antes del tratamiento ya se puede tener una idea aproximada de cuántos óvulos podremos obtener en cada ciclo.

¿Cuánto cuesta todo el proceso de congelación de óvulos?

La congelación de óvulos para postergar la maternidad es un tratamiento que no cubre a día de hoy la Seguridad Social, excepto cuando se realiza para preservar la fertilidad por cáncer. Por lo tanto, para llevar a cabo la vitrificación de los óvulos es necesario acudir a una clínica de fertilidad privada, y en función de la clínica que se elija, el precios puede sufrir importantes variaciones.

La horquilla de precios empieza en aproximadamente 2.500 euros hasta un máximo de 5.000 euros. Algunas clínicas incluyen dentro de este pago la criopreservación de los óvulos entre uno y cinco años. Una vez terminado el período de conservación acordado en el precio inicial, el mantenimento de lo óvulos congelados puede costar entre 200 y 350 euros al año.

Si estás pensando en realizar un tratamiento de congelación de óvulos puede que cuentes con ese dinero y no te suponga un problema realizar el pago que te solicite la clínica que hayas elegido. Si no es así, la mayoría de estos centros privados cuentan con planes de financiación que pueden permitirte llevar a cabo tu deseo de ser madre en un futuro con cierta comodidad.