"Hemos ido al templo de Debod y, entre que fuera hace frío y dentro del templo tienen la calefacción a tope, me ha dado un mareo que he tenido que salir y tumbarme”, comenzaba explicando Laura Escanes. La influencer había salido a disfrutar de un día de turismo por Madrid junto a Risto y Julio, el hijo del publicista fruto de su anterior relación. En mitad de este día familiar, la mujer de Risto sufrió un pequeño susto por el que, más tarde, quiso mandar un mensaje de agradecimiento.
"Todo esto es para darle las gracias a Laura”, contaba la influencer. “Me ha dado una botella de agua y galletas al verme tumbada. No sé si leerá esto pero cosas así me devuelven la fe en el ser humano”, contaba. Además de Laura, que se paró a ayudarla, otra mujer también lo hizo: “Y gracias también a otra mujer que se ha acercado a preguntar y ofrecerme galletas para que estuviera mejor”, agradecía Escanes.
Para terminar su mensaje, que iba acompañado de una foto del templo y la prueba del agua y galletas que le habían dado, Laura Escanes explicaba sorprendida que esto no le pasó en Egipto, el viaje que realizó con Risto hace un año atrás. “Lo que no me pasó en Egipto a más de 50 grados, me tiene que pasar en el templo de Debod con la calefacción”, terminaba la influencer.
Hace unos días, después de leer muchas de las críticas que recibe diariamente, la mujer de Risto Mejide acudía a las redes para pedir respeto para sus padres. “Soy bastante sensible, soy persona y me afectan las mentiras y que digan cosas sobre mi familia. Sobre todo cuando hay faltas de respeto y mala intención”, explicó la influencer. Laura Escanes considera que hay “líneas que no se deben cruzar”, porque hay temas de los que no quiere que se opinen si ella no los hace públicos.
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