Protección, alejar el móvil y otros trucos para prevenir las manchas en la cara durante el embarazo

  • Conocidas como “el paño del embarazo”, las manchas oscuras en la piel del rostro hacen su aparición con frecuencia durante el embarazo.

  • La mejor solución en este caso es evitar que aparezcan y vamos a contarte cómo puedes lograrlo.

El embarazo está lleno de sorpresas, unas más agradables que otras, y para evitar posibles disgustos nada como estar bien informada de todos aquellos cambios que puede experimentar nuestro cuerpo durante la gestación, porque en algunos casos hay formas de prevenirlos. Un ejemplo claro son las típicas manchas que aparecen en la cara y que padecen un 70% de las embarazadas, sobre todo si parte del embarazo transcurre en verano y si no han tomado las medidas de protección adecuadas.

Se trata de unas manchas de color café que suelen aparecer, sobre todo, en el labio superior, pómulos y frente, y de las que vamos a contarte todo lo que necesitas saber para evitarlas y tratarlas si es necesario.

¿Suponen algún riesgo?

Ninguno, y además ya hemos dicho que se trata de un trastorno bastante común y que solo se libran de él el 30% de las embarazadas. Las mujeres con tez oscura son más propensas a padecerlas que aquellas que tienen la piel más clara, pero son unas manchas completamente benignas. La única pega es que, al estar en un lugar tan visible como es la parte central del rosto pueden resultar antiestéticas y, por lo tanto, que no nos apetezca ni por asomo que aparezcan.

¿Por qué aparecen las manchas?

El nombre de este trastorno en la piel se llama cloasma gravídico, y las manchas que aparecen son conocidas como “el paño del embarazo”. Tienen su origen, principalmente, en los cambios hormonales que se producen durante la gestación y que comienzan en el mismo momento en el que el óvulo es fertilizado. Es en ese instante cuando el organismo de la embarazada comienza a producir hormonas como la progesterona o los estrógenos, que influyen en la producción de melanina. La melanina es el pigmento responsable de dar color a nuestra piel, además de a nuestros ojos y cabello. Las consecuencias del aumento de melanina son visibles en la piel, y además de las manchas del rostro, pueden aparecer en otras partes del cuerpo:

  • La aureola mamaria puede aumentar su pigmentación y, en ocasiones, los límites de los pezones pueden quedar desdibujados.
  • La vulva también puede verse más oscura por un aumento de la pigmentación.
  • El aumento de melanina también es la causa de la aparición de la famosa línea alba, que se dibuja como una línea oscura que va desde el ombligo hasta el pubis, aunque también es habitual que se extienda por la parte superior del abdomen.

En cuanto a las manchas en el rostro, su aparición va a estar determinada por la genética de cada mujer y por cómo se exponga al sol (con o sin protección) y cuánto.

Consejos para prevenir las manchas

El cloasma, una vez que aparece no es sencillo de eliminar, aún con tratamientos específicos. Y si lo hace, lo más probable es que reaparezca, aunque sea en menor medida, cada vez que llegue el verano.

Por eso en este caso más vale prevenir que lamentar y tomar todas las medidas necesarias para que no aparezcan. Los profesionales nos dan los siguientes consejos para que evitemos el cloasma en la medida de lo posible:

  • Usar un protector solar con un FPS muy alto siempre que salgamos de casa, sea o no verano. Esta es la medida más importante que podemos adoptar, ya que los rayos UVA y UVB del sol son la principal causa de las manchas en el rostro durante el embarazo.
  • Si es verano o vives en una zona con mucho sol no tengas reparos en utilizar un sombrero de ala ancha durante el día para proteger tu rostro del sol.
  • Las gafas de sol son otro accesorio imprescindible, y no sirve cualquiera. Asegúrate de que están homologadas y cumplen con todo los requisitos de protección necesarios, porque a través de la retina también se estimula la producción de melanina.
  • Evita usar el teléfono móvil por la noche y mantenlo apagado mientras duermes, porque se ha demostrado que la luz azul de las pantallas puede causar manchas en la piel. Con esta medida, además, seguro que consigues descansar mucho mejor, algo que a veces resulta difícil durante el embarazo.
  • Si decides usar un despigmentante tópico consulta antes con tu dermatólogo para prevenir cualquier reacción que agrave los síntomas en lugar de mejorarlos.

¿Desaparecen después del parto?

Existe la posibilidad de que las manchas que aparezcan durante el embarazo desaparezcan paulatinamente tras el parto, en ocasiones tras finalizar la lactancia. Pero permanecen en el 30% de las mujeres, y eliminarlas no resulta fácil, sobre todo si el pigmento en la piel ha alcanzado mucha profundidad.

Las recomendaciones de los expertos incluyen abandonar la medicación anticonceptiva si se tomaba antes del embarazo y no abandonar el uso diario de fotoprotectores solares, sea verano o invierno. Además, aconsejan evitar cualquier cosmético que pueda ser irritante para la piel, como algunos jabones o exfoliaciones. Tampoco recomiendan el uso de láser ni la dermoabrasión.

Las manchas de la gestación pueden desaparecer de forma paulatina después del nacimiento del bebé, pero también puede persistir, algo que ocurre en el 30% de las mujeres. Una vez instaurada, su eliminación es difícil. La recuperación depende de la profundidad que alcance el pigmento en la piel: cuanto más superficial, más fácil será su supresión.

Para tratar el melasma tras el parto, la Academia Española de Dermatología (AEDV) recomienda abandonar la medicación anticonceptiva, continuar con la utilización de filtros solares o maquillajes que lo tengan incorporado (estos además servirán para resolver el aspecto estético de las manchas), emplear jabones suaves y evitar los tratamientos que puedan irritar la piel facial, como exfoliaciones, dermoabrasión y el uso de láser.