¿Cómo me afecta la menopausia precoz o prematura? Edad a la que se puede sufrir, síntomas y tratamiento

  • La menopausia precoz es la desaparición de la menstruación y de la función ovárica de la mujer.

  • Las causas serán bastante claras y afectará a mujeres entre los 40 y los 45 años.

  • No existe ningún tratamiento, aunque sí se podrá someter la mujer a alguna terapia.

La menopausia precoz o prematura es la desaparición de la menstruación y, sobre todo, de la función ovárica de las mujeres. Esta puede darse en mujeres de entre 40 o 45 años. De esta manera, se perderá la capacidad reproductiva, antes de tiempo, y podrán padecer algunos síntomas, que serán propios de edades más avanzadas.

En la menopausia precoz se produce una disminución importante de la cifra de estrógenos y se pierde la protección natural contra ciertas enfermedades. Por tanto, habrá más posibilidades de sufrir complicaciones cardiacas, accidentes cerebrovasculares y, también, osteoporosis.

Qué es la menopausia precoz

Hay que comprender que la menopausia es una parte natural del envejecimiento, pero para algunas mujeres puede llegar antes de tiempo. Más del 5% pueden sufrir de menopausia prematura antes de los 40 años, dejando de ser fértiles antes de tiempo. De esta manera, la menopausia hará que la mujer deje de ovular, disminuyendo la producción de estrógenos y cesando el periodo menstrual.

De forma general, las mujeres suelen pasar por la menopausia sobre los 45 y los 55 años, siendo la edad promedio, los 51. También, en algunas ocasiones, la menopausia precoz se produce por tratamientos contra el cáncer o por alguna cirugía de extirpación de útero o de ovarios. Por eso, antes de nada, habrá que conocer muy bien todos sus síntomas.

Cuáles son los síntomas de la menopausia precoz

Entre los signos más comunes, nos podemos encontrar con sofocos y sudores nocturnos, dolores de cabeza, disminución de la líbido, cambios en el ciclo menstrual, irritabilidad continua, cambios de humor o problemas urinarios. También, la menopausia provocará sequedad vaginal, insomnio, baja autoestima, cambios de peso, inflamación de la vagina y el útero, así como sequedad en la piel, en los ojos o en la boca.

Por qué se produce la menopausia precoz

Esta podrá producirse por un fallo ovárico prematuro o por la histerectomía. Es decir, porque el ovario empieza a funcionar de forma diferente o por la extirpación de los órganos genitales femeninos. Además, se calcula que el fallo ovárico prematuro afecta a una de cada 250 mujeres de 35 años. De la misma forma, la menopausia precoz puede deberse a la terapia para combatir el cáncer, así como al tratamiento como la radioterapia o quimioterapia.

La menopausia precoz puede darse por enfermedades autoinmunes, condiciones genéticas o infecciones virales. Para el diagnóstico, el especialista deberá tener en cuenta diversos aspectos. Así, el médico se fijará en el historial clínico y, también, podrá realizar una exploración física y una analítica de sangre. También, el especialista podrá estudiar las causas de la amenorrea, como la pérdida extrema de peso, alteraciones hormonales y algunas enfermedades del sistema reproductor.

El médico determinará si existen enfermedades autoinmunes y tendrá que descartar la presencia de problemas genéticos. Así, los niveles bajos de estradiol, es decir, una forma de estrógeno, podrán indicar que los ovarios comienzan a fallar. Aunque eso sí, la prueba analítica más determinante será la medición en sangre de la hormona folículo-estimulante. Esta hormona será la que activará que los ovarios produzcan estrógenos.

Cuál será el tratamiento para la menopausia precoz

Respecto al tratamiento, lo primero que habrá que tener en cuenta es que no existe una medicación que haga que los ovarios vuelvan a funcionar. Aunque eso sí, como ya hemos comentado, estas mujeres con menopausia precoz tendrán más posibilidades de sufrir problemas de salud, como osteoporosis u otras enfermedades de corazón.

Por eso, se puede sugerir que estas mujeres realicen una terapia de reemplazo hormonal (TRH). Esta terapia no será recomendable en casos de cáncer de mama o de útero, antecedentes de trombosis, enfermedades hepáticas graves, sangrado vaginal no diagnosticado, enfermedades del corazón o derrame cerebral.

Los efectos secundarios más comunes de esta terapia serán las náuseas. Y no solamente eso. El hecho de estar sufriendo menopausia prematura puede hacer que muchas mujeres sientan dolor ante la perspectiva de no poder tener hijos, el miedo a envejecer antes de tiempo, el temor de que la pareja no la encuentre sexualmente activa o problemas de autoestima. Por eso, en el caso de que estés sufriendo alguno de estos últimos síntomas será muy importante el asesoramiento de psicólogos o grupos de ayuda.