Rocío Osorno acaba de dar un paso muy importante en su trayectoria profesional. La diseñadora de moda y creadora de contenido va a abrir su primera tienda física en Sevilla. En 2015 lanzó su propia marca de ropa llamada Rocío Osorno Studio que, a lo largo de los años se ha ido consolidando, llegando a convertirse en una de las preferidas por las influencers para lucir sus diseños en la tan esperada Feria de Abril que se celebra cada año en Sevilla. La primera tienda física de la influencer está ubicada en un lugar muy céntrico de la capital hispalense, concretamente, en frente de El Corte Inglés de la Magdalena, sin embargo, aún no hay fecha para su apertura.

El testimonio de Ana Lozano con críticas a los diseños que vende Rocío Osorno

Entre todas las clientas que han comprado alguna prenda de forma online en Rocío Osorno Studio, hay el testimonio de una chica llamada Ana Lozano que se ha hecho viral en las últimas horas. La joven, a través de un vídeo publicado en su perfil de TikTok, ha asegurado que se siente estafada por la influencer. Ana, compró el modelo ‘Silvia’ con el fin de usarlo el día de su graduación cuyo coste fue de 300 euros. “El vestido parecía hecho de tul de tutú del chino de debajo de tu casa con un pegote de purpurina. Yo cuando vi que había pagado 300 euros por un tutú del chino empecé a llorar, estuve llorando una semana. Parecía una niña de 5 años disfrazada para el carnaval de hada”, empieza diciendo la tiktoker en el vídeo que ha acompañado con imágenes de la prenda que recibió.

“Me parece una auténtica vergüenza que tú tengas una web “de alta costura” que vendas vestidos a precio de oro y que luego la tela sea de tutú. La tela picaba en el cuerpo, era muy áspera (…) Leeros la política de devolución y la política de la empresa porque los vestidos de Rocío Osorno no se pueden devolver”, ha explicado señalando otro de los motivos por el que estaba indignada y enfadada.

El comunicado de Rocío Osorno

El vídeo se ha hecho muy viral en las redes sociales y Rocío Osorno ha roto su silencio para dar su versión de los hechos: “Me han enviado el vídeo de una chica haciendo una valoración de un diseño mío de la colección de hace varios años y me parece cuanto menos oportunista hacerlo ahora además de injusto el tirar por tierra así como así todo el esfuerzo que hay detrás de una empresa que vuelvo a decir todo se confecciona en Sevilla”, ha comenzando diciendo Rocío Osorno señalando que sus diseños no se realizan fuera de nuestro país.

Seguidamente, la diseñadora ha dado explicaciones de donde compró la tela, el precio que tenía cada metro de ella (37 euros): “Haced cuentas solo del precio del tejido más el forro que también se cortaba a capa y sumad los costes de corte y confección”, decía así justificando el elevado precio del modelo.

“Seguro que recordáis vídeos súper virales de la época y son todos con aquel tejido de tul y purpurina que hasta entonces nunca se había visto y que los vestidos tenían un brillo impresionante, yo misma me puse todos ellos para eventos”, ha zanjado la influencer junto con imágenes de los diferentes modelos que llevaron la misma tela que ha sido criticada.