Las tendencias otoño/invierno 2025-2026 que tienes que conocer: de las hombreras al cuero en todas sus formas
Si el otoño pasado se caracterizó por la sobriedad del ‘quiet luxury’, este año asistimos al retorno del carácter, a la silueta marcada y al detalle llamativo
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A estas alturas de septiembre ya tenemos el avance de las tendencias imprescindibles del otoño/invierno 2025-2026. Las pasarelas hicieron sus propuestas en Nueva York, Londres, Milán y París, y ahora es en la calle donde cada una de ellas será validada o censurada. Estamos ante una temporada donde el exceso le roba protagonismo al lujo silencioso, y el "más es más" vuelve con toda su fuerza, pero sin perder un ápice de elegancia.
Si el otoño pasado se caracterizó por la sobriedad del ‘quiet luxury’, este año asistimos al retorno del carácter, a la silueta marcada y al detalle llamativo. El minimalismo sigue siendo protagonista, pero se retira a un discreto segundo plano para dejar paso a hombreras teatrales, estampados salvajes, tejidos exuberantes y un claro espíritu ochentero que promete tomar el control de los armarios.
Las tendencias del otoño/invierno 2025
Hombreras gigantes
La silueta ochentera regresa con fuerza y las hombreras superlativas se han convertido en uno de los principales emblemas de su vuelta. Saint Laurent e Isabel Marant lideran esta cruzada por empoderar la figura femenina, proponiendo blazers y abrigos con esa arquitectura rotunda vinculada al ‘power dressing’ que en su día popularizaron Emanuel Ungaro o Yves Saint Laurent y que contrastaba unos hombros dramáticos con una cintura muy ceñida y faldas lápiz.
Tech tailoring
La sastrería se moderniza con tejidos tecnológicos y cortes anatómicos con firmas como Loewe y Alexander McQueen, que apuestan por piezas híbridas entre lo gótico, lo clásico, lo romántico y lo futurista.
Granny chic
El estilo granny consiste, más que abrir el armario de tu abuela, en reinterpretarlo con astucia. Miuccia Prada, como siempre visionaria, junto con Burberry, reafirman la tendencia granny con broches, perlas, tweed, pañuelos en la cabeza, bolsos rígidos colgados del antebrazo y ese aire retro que, lejos de envejecer, rejuvenece con sofisticación.
Volantes boho-románticos
El romanticismo boho se presenta en prendas fluidas en los desfiles de Zimmermann, Ralph Lauren y Chloé, que apuestan por volantes etéreos en camisas, faldas y vestidos, pero los combinan con piezas de cuero, botas mosqueteras o camisetas rockeras para un look boho con espíritu rebelde.
Exceso de pieles
2025 ha dejado atrás las pieles sutiles y ahora se llevan grandes, esponjosas e incluso en tonos vibrantes o pastel. Miu Miu apuesta por abrigos enteros en piel sintética con aire de peluche, mientras Prada las usa como detalles de puños y cuellos en abrigos de lana, pero ambas firmas coinciden en que cuanto más exageradas, mejor.
Inspiración ecuestre
La inspiración ecuestre llega en forma de botas altas, capas y pantalones ajustados con firmas como Ralph Lauren, Hermès o Dior, que rinden homenaje a la estética de la equitación con un plus sofisticado y chic.
Cuadros y más cuadros
No hay otoño sin cuadros, pero esta vez llegan en formato total look o mezclados con otros estampados. Desde los tartanes grunge de Thom Browne hasta las composiciones más sartoriales de Valentino, este estampado sigue reinventándose e incluso hay quien se atreve a mezclarlos con rayas o animal print para un look ecléctico, como proponen en JW Anderson.
Vuelve la falda lápiz a la rodilla
La silueta femenina se redefine este otoño con la falda lápiz como protagonista y la rodilla como límite. Prada, Gucci y Saint Laurent apuestan por versiones ceñidas justo a la rodilla, a veces con aberturas estratégicas o en cuero. Una prenda que rezuma feminidad clásica, con un punto de sensualidad.
Terciopelo, brocados y brillos satinados
Este año mandan los tos tejidos lujosos, entre los que se han ganado un puesto de honor el terciopelo, en clave joya y de colores intensos, que conquista los trajes de noche en Gucci y Emporio Armani, los brocados, que se cuelan en los abrigos y chaquetas estructuradas de Prada, así como la seda satinada y el lamé, que elevan incluso las prendas más cotidianas.
Animal print
El leopardo es solo el punto de partida, un clásico que no va a pasar de moda y por el que apuesta Fendi, pero este otoño, el animal print se diversifica con cebras, serpientes e incluso estampados inspirados en vacas y tigres, como proponen Marc Jacobs o Stella McCartney. Se puede llevar en dosis intensas en clave ‘total look’ o como elemento puntual, como propone Saint Laurent, que demuestra que sigue siendo símbolo de elegancia atemporal.
El cuero en todas sus formas
El cuero vuelve a estar omnipresente en todas sus versiones, desde el estilo punk que defiende Rick Owens, hasta las versiones más pulidas, femeninas y sensuales en la faldas o abrigos de Saint Laurent o en los looks de inspiración años 70 de Tom Ford, donde más allá del negro triunfan algunos tonos inesperados que van desde el blanco hueso al verde oliva.