Christina Aguilera está en un cambio constante. Independientemente de sus subidas o bajadas de peso la cantante adora pasar por chapa y pintura y hacerse retoquillos en el pelo. Después de arrasar con su primer single 'Gennie in a bottle' con sólo dieciocho años en la que lo que vendía era su imagen de niña angelical con melenita rubia ceniza. Pocos años después la vimos más sexy que nunca en el videoclip de 'Lady Marmelade' vestida de cabaret, lo cual no hizo mucha gracia a su sello discográfico que tenía controlado hasta el último detalle de la imagen de la cantante.
A partir de aquí comenzaría la época rebelde que han tenido todas las 'niñas Disney' (Britney Spears y Miley Cyrus incluidas) y se pasó a un aspecto más cañero aclarándose el pelo todavía más y poniéndose extensiones negras. Para su album 'Stripped', que salió al mercado en 2002, Christina presentaba un look totalmente diferente a lo que nos tenía acostumbrados, pelo negro azabache, más piercings y con algo más de peso. Demandó a su manager para poder controlar su música y su imagen, y "poder ser por fin ella misma". Sus últimos retoques han sido menos llamativos aunque hay que tener valor para lucir esas mechas rosas.
Sospechamos que Rihanna tiene algún cupón descuento para la peluquería porque no es normal lo que esta mujer adora tunearse el pelo. De hecho, no sólo le gusta cambiarse el color, sino el largo. Un día aparece con un lado de la cabeza rapado y al siguiente le ha crecido milagrosamente. ¡Benditas extensiones!
No podemos hablar de 'época rebelde' de la cantante porque Rihanna nació guerrera como reza su tatuaje del cuello: "rebelle fleur" (flor rebelde). Empezó con una melena muy parecida a la actual, castaña y con algo de volumen, pero al poco de tener éxito mundial se desprendió de ella. Eso sí, debe de tener una cabellera a prueba de ácido nuclear porque no es de recibo que se eche tantos potingues en el pelo, ¡y tenga las puntas perfectas! Cuando el resto de los mortales tenemos que ir regularmente a acabar con ellas. ¡Cuéntanos tu secreto RiRi!
Otra de las celebs que visita con frecuencia a su Llongueras particular es Lindsay Lohan. Algo más conservadora con sus cambios de pelo (si la comparas con Rihanna, claro está). La hemos visto de pelirroja, morena y rubia platino. Tonos intensos y para nada discretos pero a pesar de ello, la actriz nunca nos ha sorprendido con un corte radical ni mucha mezcolanza en su melena. En sus comienzos lucía un pelirrojo natural que evidentemente tardará en recuperar pero como todas quiso desprenderse de su imagen de eterna adolescente.
¿Dónde quedaron los díscolos rizos de Nicole Kidman? Se deshizo de ellos en sus comienzos y nunca más volvimos a verlos. La actriz siempre ha barajado entre el cobrizo y el platino. Las dos opciones le favorecen debido al color de su piel y de sus ojos pero de tanto tinte ha acabado con un tono algo amarillento en su cabellera.
¿Con cuál de todas las opciones te quedarías?