"Me llamo Madeline Stuart, padezco Síndrome de Down y quiero ser modelo"

Madeline Stuart es una joven de 18 años australiana con Sindrome de Down y una lesión coronaria que se presenta en sus redes sociales con un objetivo claro: "Mi nombre es Madeline y quiero ser modelo", una forma de mostrar que su condición genética no es una enfermedad, si no una "bendición", tal y como lo define su madre, la responsable de que su hija recibiera con estas fotos que muestran un gran cambio físico, 100000 likes en menos de 48 horas y que ahora ya acumula 300.000 en sus redes sociales. Tras adelgazar casi 20 kilos, se puso delante de una cámara sin ningún complejo para transmitir que con ejercicio, buena alimentación y seguridad, todo es posible. Te contamos su historia.

"Ella no tiene complejos, ni le importa como se ve, pero ahora está contenta de sentirse bien consigo misma todo el tiempo", declara su madre. Está claro que el ejercicio y la buena alimentación han cambiado la vida de esta joven, pero no hubiera sido posible sin el apoyo de su madre. Una superación que a Madeline le ha valido para ganarse miles de seguidores de la mano de ella, quien confirma la buena y mágica relación que existe entre ellas y que lamenta que se tenga que viralizar una campaña de este tipo para que su hija consiga ser modelo con Síndrome de Down. "Quiero que la gente deje de decir 'lo siento' cuando les digo que mi hija tiene síndrome de Down", ha declarado en el Daily Mail.

Esta joven australiana quiso cambiar su físico y su estilo de vida con la ayuda de su madre y de su profesora de danza. La motivación le vino por no poder hacer volteretas o el pino como cualquier adolescente debido a su sobrepeso. Por eso se puso manos a la obra con mucho ejercicio, cambio de alimentación y sobre todo, actitud. Comenzó a nadar de 3 a 5 días a la semana, a jugar al baloncesto mientras hacía de animadora y a bailar hip hop. Una vez conseguido su logro y perder casi 20 kilos, se propuso otro objetivo: convertirse en una modelo con Síndrome de Down para hacer visible la enfermedad y acercarla a la sociedad sin ningún tipo de complejo y de forma innovadora.

Pero Madeline también tiene tiempo para socializarse. ¡Y es que esta chica no para! Además de practicar deporte, cambiar drásticamente su alimentación y estar centrada en su objetivo de ser modelo, la joven participa en un grupo de teatro, uno de literatura y otro de hip hop, algo que complementa siendo animadora. Unas actividades con las que parece que ella más que cansada está encantada porque todo grupo social, trae un círculo de amigos distinto y ella parece haberse convertido en un miembro muy popular entre todos ellos.

Comenzó a prepararse con un entrenador personal para competir en las Olimpiadas Especiales. Finalmente consiguió representar a su estado 3 veces con el juego del cricket, así como participar en campeonatos del estado de otros deportes como la natación, gimnasia y el baloncesto, todo ello a través de las Olimpiadas Especiales. Por otro lado, Madeline llegó a liderar la ceremonia inaugural de los juegos de Asia hace 2 años, un tiempo en el que también triunfó en Los Ángeles con su compañía de danza.

'Living Dead Clothing' fue la empresa de ropa que se puso en contacto con la madre de Madeline cuando la página de Facebook que creó se viralizó en Australia y en el resto del mundo. Su primer paso fue mandar un paquete con algunas de sus mejores prendas con el objetivo de que Madeline se sintiera bella y divertida por dentro y por fuera, siguiendo la línea de la colección de "hacer los sueños realidad". Algo a lo que ella no dudó en responder posando con ellas y a la misma vez, aprovechar esta primera sesión de fotos para presentarse como modelo compartiéndolas en sus otras redes sociales como 'Facebook' o 'Instagram'.

La historia de Madeline es la de una superación que comenzó con una simple foto en una red social. Ahora sólo queda que alguna agencia se interese por la joven para modelar y pueda demostrar el objetivo que persigue y que reafirma su madre, que es que una persona con Síndrome de Down se sienta bella y sexy y pueda mostrarlo y celebrarlo. Aunque está claro que Madeline ya ha conseguido mucho con su seguridad y naturalidad en sus redes sociales. "Ella ahora está mucho más feliz. Se pasea por la casa con su mano detrás de su cabeza balanceando las caderas. No es nada insegura y yo le recuerdo todos los días lo increíble, divertida, elegante y maravillosa que es."