Para el MOJITO, un vestido corto de cóctel verde ácido como la lima, el de Cara Delevingne, o uno largo de fiesta en el tono de la hierbabuena como el de Keira Knightley.
Para hacer la bebida cubana más internacional hay que colocar en un mortero 12 hojas de hierbabuena, 2 cucharadas de azúcar moreno, el zumo de una lima y machacar los ingredientes hasta que se mezclen los sabores. Añadir hielo picado hasta la mitad del vaso, verter 50 ml. de ron blanco y volver a echar hielo hasta arriba, terminar añadiendo soda y decorar con rodajas de lima y un par de hojas de hierbabuena.
Para un NEGRONI, el vestido corto asimétrico de Laura Sánchez, o largo y brillante como el de Nieves Álvarez en el color teja del vermut rojo.
Es un cóctel que, según los entendidos, se debe preparar en el vaso en que se va a tomar, sin coctelera. Las bebidas se servirán frías para evitar que el hielo se derrita rápidamente. En un vaso bajo y ancho se colocan dos cubos de hielo y se añaden una medida de vermut rojo, una medida de Campari y otra de ginebra. Se sirve con una rodaja de naranja.
Para un BRANDY ALEXANDER nada como un vestido blanco con el que enseñar piel, bien de cóctel con transparencias, el de Rosamund Pike, o largo de fiesta con escote en la espalda, como el de Marion Cotillard.
La variedad más popular del cóctel Alexander se prepara en una coctelera en la que colocamos el hielo, una medida de brandy, ¾ partes de la misma medida de licor de cacao y la misma cantidad de nata líquida. Hay que agitar la coctelera hasta que su exterior quede escarchado, colocar la mezcla en una copa de coctel y rallar una pizca de nuez moscada.
Para tomar un DAIQUIRI, optamos por el color de la pulpa de la lima, en versión cóctel como el vestido de Eugenia Silva o largo hasta los pies, como el Gucci de Manuela Velasco.
Aunque existen muchas maneras de hacer el Daiquiri, la más famosa es la del bar “La Floridita” de La Habana, también conocido como daiquiri Hemingway. Se realiza en una coctelera con 5 ó 6 hielos a la que se añaden 2 partes de ron blanco, 2 parte de zumo de lima y 2 cucharadas de azúcar. Se sirve en copa de coctel.
Para el COSMOPOLITAN optamos por el color de los arándanos, en versión corta, el Balmain de Kate Bosworth, o el de noche que viste su mejor embajadora, Sarah Jessica Parker.
Si una bebida se hizo popular en la serie “Sexo en Nueva York” fue el cóctel Cosmopolitan que siempre bebía Carrie Bradshaw. Se prepara en coctelera con 4 partes de vodka, 2 de zumo de arándanos concentrado, media de zumo de lima y otra media de curasao triple seco. Se sirve en copa de coctel sobre la que se aplica un twist de limón (retorcer un trozo de cáscara) que luego se puede colocar dentro de la copa.
El WHISKY SOUR adopta una tonalidad similar al color de piel, por eso los tonos nude de los vestidos de Cate Blanchett y Ana Fernández son las alternativas elegidas para este cóctel.
El Whisky Sour es una bebida de origen chileno compuesta por 4 partes de bourbon, 2 de zumo de limón, 2 cucharadas de azúcar y, opcionalmente, clara de huevo. Se introducen 4 hielos en una coctelera con todos los ingredientes y se agita hasta notar escarchado el exterior. Se sirve en un vaso corto adornando la bebida con una cereza.
Un COCTEL DE CHAMPAGNE, como no podía ser de otra manera, requiere un vestido dorado, ya sea corto y con destellos, como el de Marina Jamieson, o igualmente brillante pero en versión larga, como lo lleva L’Wreen Scott.
Este cóctel se prepara directamente en la copa colocando un terrón de azúcar en el fondo. Se agregan, por este orden, 2 ó 3 gotas de angostura, un chorrito de brandy, terminamos de llenar la copa con champagne y adornamos con una guinda o una espiral de corteza de limón o naranja.
El DRY MARTINI “mezclado, no agitado” nos trae a la memoria al siempre impecable James Bond, por eso la prenda para tomar esta bebida tenía que ser el esmoquin, en versión moderna, como lo lleva Miley Crus, o la clásica de Laetitia Casta.
Aunque de la versión original del Dry Martini existen múltiples variaciones, las proporciones clásicas son 3 partes de ginebra por 1 de vermut seco. Se coloca hielo en el vaso mezclador, se añaden la ginebra y el vermut (se pueden invertir las proporciones para suavizar la bebida) y se mezclan con una cuchara. Finalmente se aplica un twist de limón y un par de aceitunas atravesadas por un palillo.
Para un OLD FASHIONED, nada mejor que una silueta ‘vintage’ como las propuestas por Dior en los modelos de Nicole Kidman y Jennifer Lawrence.
A pesar de su nombre no se trata de una bebida pasada de moda aunque quizá sea uno de los cócteles más antiguos de la historia. Se prepara en un vaso ancho y bajo, en el que se va a tomar, con un terrón de azúcar y 2 gotas de angostura que se mezclan hasta disolver el azúcar. Con el almíbar pintar el vaso y añadir 1 rodaja de naranja, apretándola para que suelte algo de zumo, 4 partes de burbon y 1 golpe de soda. Terminar decorando la bebida con una espiral de limón.
El BLUE LAGOON es una bebida azul brillante y este es el tono elegido para su vestido de cóctel por Marina Jamieson y por la Princesa Charlene de Mónaco para su largo vestido de fiesta.
El pionero de las bebidas de color, inspirado en la película “El Lago Azul”, se compone por 3 partes de vodka y 3 de curasao azul que se mezclan por separado. El resultado se vierte en un vaso largo con hielo y a él se añaden 4 partes de zumo de limón. Finalmente se decora el vaso con una rodaja de limón.
Para un BLOODY MARY es obligatorio el color rojo intenso del tomate, ya en versión cóctel, como lo lleva Zhang Ziyi o en estilo princesa como el de Audrey Tautou.
Dicen del Bloody Mary que es lo mejor contra la resaca. Para hacerlo es necesario utilizar un vaso mezclador en el que se colocan 5 hielos, 1 parte de vodka, 3 de zumo de tomate, un limón exprimido, 3 gotas de tabasco, 1 pizca de sal y 1 pizca de pimienta negra. Se vierte en el vaso y se decora con una ramita de apio.
Un GIN TONIC clásico no tiene color, sólo el amarillo del limón, por eso los vestidos blancos son una buena opción, con un solo detalle dorado en la cintura de Angelina Jolie o un bolso amarillo en el caso de Alessandra Ambrosio.
Para un Gin Tonic perfecto colocamos hielo hasta llenar un vaso o copa de boca ancha y aplicamos un twist de lima o limón, a continuación restregamos la corteza por el borde de la copa y la colocamos en el interior del vaso. Verter la ginebra a cierta distancia de la boca del vaso contando 3 segundos, rellenar hasta arriba de tónica y finalmente con una cuchara mezcladora dar una vuelta para que salten las burbujas.