Dulceida está siendo acosada desde que anunció su ruptura con Alba Paul: "Me hizo estar mucho peor"

El 15 de octubre de 2021, tres meses después de haberse dado un tiempo para reflexionar sobre su futuro en común, Dulceida y Alba Paul anunciaban su separación. Era la propia Aída la que, a través de su perfil de Instagram, compartía con su comunidad el texto que más “le ha costado escribir” en su vida. “Hemos decidido seguir nuestros caminos por separado”, se abría en canal con sus ‘preciosos’ tras siete años de historia de amor.

Después unos meses “duros, tristes y de conversaciones infinitas”, la pareja priorizaba su bienestar y tomaba la decisión “más difícil que hemos tomado nunca”. Eran conscientes de que para estar “bien, fuertes, estables y felices”, debían dan por finalizada su relación. “Duele mucho ver que se acaba, pero el amor continúa en nosotras y siempre lo hará”, tenían claro que seguirían “viéndonos de cerca siempre” aunque empezaran a “volar por separado”.

Desde entonces se les ha visto juntas compartiendo planes ya que tienen el mismo grupo de amigos. Cada reencuentro entre ambas es celebrado por sus seguidores, que aún fantasean con una posible reconciliación. Sin embargo, desafortunadamente, no todo lo que recibe en las redes sociales son buenos deseos y mensajes de cariño. Dulceida ha tenido que tomar medidas legales por el acoso digital al que está sometida desde su ruptura.

"Es muy fuerte. Estoy con demandas y todo. Estamos hablando de una cosa muy grave. Tengo un acoso diario, a raíz de mi ruptura, a mí y a todo el que me rodea. Amigos de ella, amigos míos, familia. A todo el mundo, ni te lo imaginas", lamentaba Dulceida en su última entrevista. "A todos los sitios a los que voy, se meten en el Instagram de gente que no conocen que ha estado en ese sitio para ver con quién estoy, qué hago, qué dejo de hacer. Me insultan todo el rato, me llaman todo lo que te puedas imaginar", denunciaba.

Un tema que ha vuelto a tratar en su cuenta de Instagram, después de que una seguidora, conocedora de esta situación, quisiera saber en un ‘preguntas y respuestas’ cómo ha podido soportar esta presión. “Pues al principio no lo soportaba, ya estaba mal de por sí y esto me hizo estar mucho peor. Exigían y pedían explicaciones de todo –cosa que me parece horrible y yo jamás haría con nadie-. Se inventaban cosas cada dos por tres, era un acoso horrible. Lo siguen haciendo, pero ahora me da exactamente igual, me río, me dan penita y fin”, ya no le afecta. “Si así tienen un poquito de vida…”.