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Están siendo unas semanas muy intensas para Sara Carbonero e Iker Casillas. El pasado 12 de marzo, la pareja anunció su separación a través de un comunicado, una noticia que hicieron pública propiciada por unos supuestos audios del futbolista y rumores de que ya estaban haciendo vidas separadas. Tanto la periodista como el deportista aseguraron entonces que seguirían juntos “en la maravillosa tarea de seguir siendo padres dedicados” a sus dos hijos, Martín y Lucas, fruto de sus once años de relación.
La revista Diez Minutos confirmaba hace unos días que Iker y Sara se habían visto en el Juzgado de Pozuelo de Alarcón, donde habrían firmado su divorcio de manera amistosa. Según anunciaba el medio citado, la pareja habría llegado al acuerdo de que sea la periodista quien se quede con la custodia de los dos menores, con quienes vivirá en la casa familia de La Finca. Por su parte, el futbolista correrá “con todos los gastos de la educación de los niños” y acaba de mudarse a una casa valorada en más de un millón setecientos mil euros. Este nuevo hogar, en el que han podido fotografiarle en los últimos días, se encuentra muy cerca de la casa familiar, lo que le permite acudir cada día para llevar a los niños al colegio.
El mismo día que se hizo público el supuesto acuerdo entre la pareja, Iker Casillas se mostró muy enfadado tras las preguntas de los paparazzis sobre su divorcio, unas imágenes que puedes ver en este vídeo:
Días después de que se hiciese público que podrían haber disuelto su matrimonio, la periodista puso rumbo a la isla de La Graciosa, al norte de Lanzarote, con su íntima amiga, Isabel Jiménez, el marido y los dos hijos de la presentadora, un par de parejas más y un amigo que les esperaba allí para acompañarles en su visita por la isla. Según relata la revista Diez Minutos, al llegar a Lanzarote les recibió José Luis, el amigo íntimo de Isabel Jiménez y de su marido, y pasaron estos días en su casa.
José Luis es un empresario canario que reside en las Palmas y que fue gerente del Patronato de Turismo de Fuerteventura. Según asegura el medio citado, el joven podría haberse convertido en “el mejor apoyo de Sara” tras la ruptura. Cinco días después, la periodista puso rumbo de nuevo a Madrid y pasó con él dos horas de espera en el aeropuerto. Pero Isabel Jiménez no ha tardado en desmentir esta información con unas declaraciones a la revista ¡Hola!. La íntima amiga de la periodista asegura que es "totalmente falso" que esté "ilusionada" de este empresario. "Su mujer no vino con nosotros a La Graciosa por trabajo, pero comió el sábado en Las Palmas con nosotros", ha contado.
El futbolista ha comenzado una nueva vida tras su separación. Según hacía público la revista Semana hace unos días, Iker ya está instalado en una nueva casa que ha comprado muy cerca del domicilio familiar. Otro de sus llamativos gestos es que ya no posa con el anillo de casado que lucia en los últimos cinco años. El portero disfrutó el pasado fin de semana de una cena juntos a algunos amigos como Chema Alonso, Christian Gálvez o David Summers. En la imagen que publicaron en redes, según adelantaban ¡Hola!, Iker no lleva su alianza.
Esta es una decisión que ha tomado en las últimas semanas, tras su divorcio, ya que en imágenes anteriores, del pasado verano, el deportista sí aparece con la alianza de su matrimonio con Sara Carbonero.