Hiba Abouk recibe un duro e inesperado golpe durante su proceso de divorcio de Achraf Hakimi

Achraf Hakimi se encuentra imputado formalmente por un presunto delito de violación. Las investigaciones continúan su curso, aunque tras el escándalo, su mujer, la actriz Hiba Abouk, fue tajante y anunció la drástica decisión que había tomado: divorciarse del padre de sus hijos. Ahora, la actriz y protagonista de series como ‘El príncipe’ recibe un duro golpe al descubrir la maniobra que su expareja habría realizado antes de que se iniciase el proceso de divorcio y que afecta a su separación de bienes.

Aunque posteriormente la protagonista de ‘El príncipe’ asegurase que su divorcio estaba previsto desde antes de que su marido fuese imputado de agredir sexualmente a una joven de 24 años, lo cierto es que no dudaba en pronunciarse más tarde y marcar posiciones asegurando que “siempre” estaría del lado de las “víctimas”.

Su divorcio con el futbolista del PSG, uno de los mejor pagados de la liga de fútbol francesa (recibiría según medios especializados en torno al millón de euros mensual), continúa su curso.

El patrimonio del marroquí es elevado, aunque también lo es el de la intérprete española con ascendencia tunecina y libanesa. No obstante, según informaciones del medio francés ‘First Mag’, Hiba se habría llevado una gran sorpresa en relación al reparto de bienes.

"Cuando la actriz y sus representantes legales acudieron a la justicia francesa para solicitar la cantidad que consideraban que le debía corresponder en el divorcio, la Corte les dijo que no existía tal fortuna. La razón es que Hakimi había puesto todas sus ganancias a nombre de su madre bastante tiempo atrás", explican desde el citado medio.

Sería por tanto Saida Mouh, suegra de Hiba, quien gestionaría las ganancias de su hijo; algo que al parecer la actriz desconocía.

Sea como fuere, y aunque a los hijos en común del todavía matrimonio no les faltará nunca de nada, desde el citado medio aseguran que el equipo de abogados de la intérprete trabajarán para que las necesidades de los menores estén cubiertas.