Así fue la boda de Pedro Larrañaga y Silvia, hija de Tony Leblanc, antes de conocer a Maribel Verdú

Pedro Larrañaga y Maribel Verdú forman desde hace más de veinticinco años una sólida pareja. Ellos han encontrado en el otro a su mejor compañero de vida y cada vez que hablan sobre su relación, las alabanzas se convierte en la tónica general. Su amor no parece tener fin y ellos tienen claro que es por el buen equipo que hacen en todos los aspectos de su vida. 

“Cuando lo conocí, hacía cinco películas al año, porque lo que quería era salir de mi casa. Pero desde que estamos juntos, lo que me gusta es disfrutar de la vida con él. Escojo cosas en las que creo de verdad”, explicaba la actriz durante su paso por el programa de Jesús Calleja. Se conocieron gracias a uno de esos trabajos que Maribel escogió por amor y no buscando una salida. Quedó enamorada del personaje de la serie Canguros y gracias a ello se enamoró de Pedro. 

Pedro fue el hombre que hizo que Maribel se replanteara algunas de las cosas que siempre había tenido claras. “Yo desde que era muy pequeña he tenido claro que no quería llevar una vida convencional”, contaba Verdú hace tiempo en una entrevista para El Economista. “No quería casarme, ni tener hijos, ni ir el fin de semana a los centros comerciales”. 

Con Pedro se casó, pero no tuvo que renunciar a nada, porque han caminado por la misma vereda. Llegaron al acuerdo de no pasar más de 15 días sin verse y ese parecer ser, en parte, el secreto de su felicidad. Otros los desveló la actriz en Diez Minutos: “El secreto de lo nuestro es muy claro: querernos, respetarnos, admirarnos, que no exista rivalidad entre nosotros, reírnos a todas horas... y algo muy importante, el sexo, porque si no nos entendiéramos en la cama, nos convertiríamos en amigos”. 

Ella tenía claro que no quería ser madre y en esto también Pedro ha estado de acuerdo, aunque él sí que tiene un hijo fruto de una relación anterior y gracias a eso, la pareja ejerce de abuelos desde el año 2011. Maribel solo se ha casado una vez, con Pedro, pero él ya se había casado con anterioridad, un breve matrimonio con Silvia, hija del actor Tony Leblanc. 

La boda de Pedro Larrañaga y Silvia, hija de Tony Leblanc, antes de conocer a Maribel Verdú

Antes de conocer a Maribel Verdú, Pedro había estado casado con Silvia, una boda que unió a dos grandes nombres del mundo de la interpretación. Fue una boda en Ibiza a la que no faltaron los Larrañaga Merlo, aunque Toni Leblanc no pudo estar presente, tal y como recogieron en la revista Semana en el año 1996. 

Para la discreta boda, la novia escogió un diseño ligero de tradicional color blanco, con escote redondeado, tirantes rectos y con gran movimiento gracias a los volantes grandes que formaban la falda, con mucha caída. Optó por llevar el cabello recogido, desde donde se sujetaba el velo, y llevó un ramo de flores blancas en cascada. Sencilla, pero elegante y, sobre todo, sonriente.