Carolina Marín se sincera sobre su duro episodio de bullying en su infancia: "Me sentía muy mal conmigo misma"

Carolina Marín se abre sobre su dura infancia en la que sufrió bullying y explica cómo logró superarla
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Carolina Marín es una de las deportistas españolas más reconocidas a nivel internacional. Campeona olímpica en Río 2016, triple campeona del mundo y siete veces campeona de Europa, su nombre es sinónimo de esfuerzo y superación. Desde que a los ocho años cogió por primera vez una raqueta de bádminton, Marín ha recorrido un camino de éxitos que la ha llevado a convertirse en un referente del deporte español. Pero su trayectoria no ha estado exenta de obstáculos. Además de las graves lesiones que ha sufrido en los últimos años, la onubense tuvo que enfrentarse en su infancia a una dura etapa de bullying, una experiencia que ha decidido compartir para ayudar a otros jóvenes que atraviesan situaciones similares.
En el terreno personal, Carolina siempre ha sido discreta. Durante un tiempo mantuvo una relación con el atleta Gen Esteban San Millán, con quien compartía su pasión por el deporte. En redes sociales, donde acumula miles de seguidores, muestra su faceta más cercana y natural, aunque también ha reconocido que internet puede ser un espacio complicado para la salud mental de los deportistas.
Carolina Marín se abre sobre el bullying que recibió
Recientemente, Carolina Marín participaba en una iniciativa organizada por LaLiga contra el acoso escolar. En el acto, celebrado en la sede de la institución, la jugadora habla abiertamente sobre su propia experiencia y la importancia de que figuras públicas se impliquen en este tipo de proyectos. “No tuve ninguna duda en participar porque yo también sufrí bullying de pequeña”, explica. “Para los jóvenes, tener una voz de referencia como la de un deportista es importante”.
Durante su intervención, Marín ha destacado el valor que tienen estas campañas para visibilizar el problema y ofrecer apoyo a quienes lo padecen. “Eché de menos iniciativas como esta porque en mi época nadie me enseñó un vídeo con un mensaje así. Hoy me siento muy orgullosa de poder transmitirlo y ser esa voz de apoyo que yo no tuve”, señala.
La campeona reconoció que durante su infancia no encontraba formas de canalizar lo que vivía, pero que el deporte se convirtió en su refugio. “Una de mis salidas fue el bádminton. También el apoyo de mis padres y el momento en que decidí hablar con el director del colegio sobre lo que me pasaba. Me sentía muy mal conmigo misma, pero aprendí que pedir ayuda es necesario”.
Cómo lo superó y su visión de las redes sociales
Superar aquella etapa no fue fácil. Marín asegura que el paso del tiempo y la madurez le ayudaron a identificar a las personas que quería mantener a su lado. “Con los años aprendes a saber quién suma y quién resta. Eso también es parte del proceso de curación”, explica. Por eso, anima a los jóvenes a no guardar silencio y a apoyarse en quienes les hacen sentir bien: “Es importante que los niños y niñas tengan la confianza de hablar con sus padres, amigos o profesores. Todos podemos ayudar frente a esta lacra”.
En la actualidad, Carolina también reflexiona sobre el papel de las redes sociales, a las que considera “un arma de doble filo”. “Pueden ayudar mucho, pero también pueden ser negativas y perjudicar”, señaló. “A nivel personal, he tenido que trabajar mucho la cabeza. Superar comentarios o situaciones negativas ha sido muy importante para mí, y trato de quedarme con la parte positiva y con los mensajes de cariño”.
