Sara Carbonero vuelve a Oporto tras su divorcio con Iker Casillas

Han pasado cuatro meses de aquel 12 de marzo en el que Iker Casillas y Sara Carbonero hicieron pública su separación a golpe de comunicado. Tras los rumores que se adelantaron a que habían decidido llevar vidas separadas, la periodista y el deportista explicaron públicamente que se sentían “enormemente orgullosos” de la familia que habían creado y de compartir un amor que les llenó de felicidad durante los años de unión. Además, adelantaron que esas serían “las únicas palabras públicas” que realizarían y que seguirían unidos en la “maravillosa tarea” de seguir siendo padres dedicados a sus dos hijos, Martín y Lucas.

Desde entonces han sido muchos los rumores sobre su relación. Posibles infidelidades por parte del futbolista, declaraciones que ha negado haber dado a diversos medios y posibles nuevas ilusiones que han quedado finalmente desmentidas. Lo que sí han dejado claro que es que entre ellos sigue existiendo una buena y cercana relación, ya que algunos paparazzis han podido fotografiarles juntos entrando en la nueva casa que Iker Casillas se ha comprado muy cerca de la vivienda donde residen Sara Carbonero y sus dos hijos en común.

Tras todo esto, y cuando parece que la polémica sobre su separación está más calmada, la periodista ha aprovechado unos días libres para viajar a Oporto, la ciudad que fue su casa durante los últimos cinco años. “Volver”, ha escrito Sara Carbonero en un post de su Instagram donde ha hecho un recopilatorio de algunas fotografías “sin filtros” en “la ciudad más bonita del mundo”.

Fue en el año 2015 cuando la pareja y sus dos hijos decidieron mudarse a Oporto. Meses antes de su vuelta, Iker Casillas explicó que aquella decisión, que vino precipitada por su salida del Real Madrid y su contrato con el equipo Portugués, tuvo relación con que “necesitaba volver a sentirme otro”. “Tener un nuevo ambiente, abandonar estar tan expuesto a la crítica y querer mejorar”, confesó el pasado año. En este vídeo puedes recordar cómo era la casa en la que vivió la pareja durante su estancia en el país vecino.

Aquella ciudad les dio muchas cosas y siempre han tenido buenas palabras para los cinco años que vivieron allí. Pero también fue el lugar donde les pasaron los dos momentos más duros de su vida: el infarto de miocardio del deportista y el cáncer de ovario de la periodista. Cuando Iker Casillas finalizó su contrato en el equipo portugués, la pareja decidió volver a España entre rumores de separación que poco después terminaron confirmando. Ahora, la empresaria ha vuelto de visita, “con todo”, a la ciudad en la que vivió sus últimos años con Iker Casillas.