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Cada vez son más las personas que buscan productos naturales para cuidarse, pensando tanto en su beneficio como en el del medio ambiente. Entre los productos que más seguidores ganan cada día está el champú sólido natural para cuidar el cabello, perfecto para conseguir un pelazo, sano y protegido, de la manera más ecológica. Los champús sólidos son mucho más que una moda eco, y merece la pena conocer todas sus ventajas para que te animes a probarlos, más pronto que tarde, y descubras una nueva forma de lavarte el pelo.
Suponen un retorno a la jabonería tradicional, incorporando todo tipo de aceites esenciales, como jojoba, oliva o karité, extractos de plantas o frutas como la naranja, la papaya o el limón, y no incorporan sulfatos, parabenos o siliconas. Estos últimos son sustancias que, con el tiempo, pueden dañar la piel y el cabello. No todos los champús sólidos prescinden de ellos, por lo que si buscas que el tuyo sea natural es importante que leas el etiquetado.
No utilizan plásticos en su embalaje, y lo sustituyen por otros materiales sostenibles que cuidan del medio ambiente. La mayoría de los fabricantes optan por cajitas de cartón o papel kraft biodegradables. Su fabricación reduce la emisión de gases contaminantes, algo que, aunque no veamos cuando usamos el champú, merece la pena saber. Por otro lado, la mayoría de ellos no están testados en animales, por lo que son “cruelty free”.
Además, una pastilla de champú sólido dura hasta tres veces más que un bote de champú tradicional, por lo que supone un interesante ahorro para el bolsillo, a pesar de que el precio inicial resulte más caro que el de otro tipo de champú. Piensa en todas las botellas de plástico que dejan de arrojarse al planeta cada vez que usas un champú sólido natural.
Llevar contigo tu champú favorito cuando viajas no es sencillo, sobre todo si lo haces en avión. Viajar con líquidos, además de la cuestión del espacio en la maleta suele ser un problema en muchas ocasiones. Con una pastilla de champú sólido no tendrás que renunciar a lavarte el pelo como te gusta cuando no estés en casa. No ocupan apenas espacio y, al no contener líquidos, no supondrán ningún inconveniente a la hora de pasar los controles en el aeropuerto.
Al tratarse de un champú que prescinde de sustancias químicas como los sulfatos o parabenos, el cabello se somete a un proceso de desintoxicación que le permite recuperar su hidratación natural y volverse más flexible, resistente y brillante. El cuero cabelludo también se ve beneficiado, y pueden desaparecer problemas de irritación cutánea, picores o caspa.
Además, no todos los champús son iguales, y los hay específicos para pelo graso, debilitado o con caspa. Y una ventaja añadida: al llevar solo ingredientes naturales puedes utilizarlos también en el cuerpo, incluso si tienes la piel sensible.
Se utilizan exactamente igual que un champú tradicional. Puedes frontal el champú sobre el pelo mojado y luego repartir el producto por todo el cabello mientras creas espuma. También puedes frotarlo en las manos y de ahí pasar al cabello. La frecuencia de lavado es la misma a la que estés acostumbrada, aunque lo más seguro es que con el uso vayas notando que el pelo aguanta limpio más tiempo y no necesites lavarlo tan a menudo como antes.
Hecho en Francia, este champú es natural al 94% y ecológico. Pensado para hidratar en profundidad el cabello y llenarlo de vitalidad gracias a su fórmula enriquecida con aceite de avena y aceite orgánico de almendras dulces. Apto para todo tipo de cabellos. Precio: 8,99 euros.
Este champú es ideal para pieles sensibles. Además de limpiar el cabello en profundidad y dejarlo brillante, calma el cuero cabelludo. Recomendado también para cabellos rizados, que necesitan un extra de hidratación ya que tienden a resecarse. Está formulado con manteca de karité y aceite de nuez. Precio: 10,99 euros el pack de 2 jabones.
Un champú hecho a mano en Londres con ingredientes naturales 100%. Las plantas y aceites que contiene reparan los cabellos débiles y secos, aunque también es ideal para cabellos normales. Repara y fortalece, agregándoles brillo y humedad. Sin fragancia artificial y apto para veganos. Precio: 9,13 euros.
Este champú contiene un combinado de extractos de fruta que es toda una experiencia. El extracto de papaya mantiene la humedad del cabello, el de naranja lo purifica, calma el cuero cabelludo y elimina la caspa, y el de limón acondiciona el peinado y ayuda a fijarlo. No contiene jabón y es vegano. Precio: 7,95 euros.
Envuelto en una bolsa de yute encontrarás este champú con una formulación a base de aceites vegetales de lo más completa. El aceite de oliva hidrata, calma y es antibacteriano, el de coco regenera, el de girasol estimula el crecimiento y el de ricino suaviza. Además, contiene manteca de cacao y karité. Precio: 5,25 euros.