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Sandra Gago ha decidido cambiar radicalmente de look. Se ha dejado convencer por el estilista Manu Fernández para apuntarse a uno de los cortes de pelo que mejor sienta: la melena desfilada con flequillo ‘wispy’.
Lo cierto es que el final del verano es una ocasión perfecta para hacer una visita a la peluquería con el fin de sanear el corte, renovar el color y hacerse algún tratamiento que devuelva el brillo al pelo castigado por el sol y la sal del mar. Pero cortarse el flequillo son palabras mayores, por eso es imprescindible dejarse asesorar por profesionales que darán con el más adecuado para tu tipo de pelo y forma de cara.
Para quienes no se atreven con un tipo de flequillo muy marcado que exija cuidados excesivos el ‘wispy’ es la solución perfecta. Se trata de un corte desfilado similar al flequillo cortina, que además de ser muy versátil, favorece muchísimo.
Sandra Gago ha optado por combinar dos tendencias en su nuevo corte. El cambio más evidente es un nuevo flequillo largo, desfilado y escalado hacia los lados que se puede llevar abierto o cubriendo la frente.
El otro cambio son las capas que su estilista ha creado en la zona cercana al rostro, que además de sanear el cabello aportan volumen y movimiento sin que afecte al largo de la melena, que se mantiene con la misma longitud.
Cualquiera puede apuntarse a esta clase de flequillo porque favorece a todo tipo de rostros y va bien a todo tipo de cabellos, ya sea liso o rizado, largo o corto. Otra de sus ventajas es que necesita poco mantenimiento porque si se lleva a la altura de las cejas se puede peinar hacia adelante y si crece más allá es posible despejar los ojos abriéndolo con la raya en medio o peinándolo hacia un lado.
Antes que Sandra Gago era Sara Carbonero quien daba la sorpresa con un corte de flequillo similar al de la modelo. La periodista optaba por un desfilado a la altura de los ojos y una melena XL con algunas capas superiores muy largas.
Blanca Suárez también sorprendía este verano con un corte de flequillo, en su caso algo más radical porque ha optado por el llamado ‘baby bangs’, el flequillo que popularizó Audrey Hepburn en 'Vacaciones en Roma': a media frente y desfilado. Es un corte muy marcado, por esa razón no sienta bien a todo tipo de rostros, aunque la actriz es capaz de defenderlo con mucho estilo.