Contouring de ojos, la tendencia de maquillaje que promete agrandar tu mirada: cómo hacerlo

  • Realzar la mirada y corregir imperfecciones es posible gracias a la técnica de maquillaje de ojos en tendencia.

  • Se trata del contouring de ojos y, aunque suena a novedad, es una técnica que muy posiblemente ya hayas utilizado sin llamarla así.

  • Te contamos en qué consiste y cómo puedes hacerlo en casa.

Si maquillarnos siguiendo la técnica del contouring supuso toda una revolución a la hora de buscar la mejor versión de nuestro rostro, ahora es el momento de abrirle paso al contouring de ojos, la nueva tendencia beauty de la temporada. Lo cierto es que la técnica en sí misma lleva años utilizándose por parte de los maquilladores profesionales y, de hecho, es muy posible que tú misma la apliques en casa cuando te maquillas los ojos.

Se trata de una técnica que realza y da forma a los ojos a través de un juego de luces y sombras que se consigue combinando diferentes productos y tonalidades de maquillaje. En realidad, consiste en sacarle el mayor partido a los colores oscuros y claros para que la mirada quede perfectamente esculpida.

Celebs como Blake Lively, Emily Ratajkowski o Gigi Hadid son asiduas al “eye contouring” para lucir una mirada de impacto en las ocasiones especiales, aunque lo cierto es que también es una forma de maquillar que puedes utilizar en tu día a día.

Para quién es el contouring de ojos

Es un técnica perfecta para cualquier tipo de ojo, y que puedes complementar o no, con el contouring para el rostro. Aunque los expertos no la recomiendan si tienes el ojo muy caído, ya que en ese caso es preferible probar con otro tipo de técnicas, como el ahumado. Y puesto que para realizarla hay que maquillar el párpado al completo, debes tener cuidado si lo tienes muy graso y los productos no se fijan lo suficiente a tu piel, porque el resultado podría arruinarse antes de lo que te gustaría.

Cómo se realiza el contouring de ojos

Lograr el maquillaje preciso que vemos en Instagram, realizado por maquilladores profesionales, no es nada sencillo. De hecho, ahí es donde la profesionalidad marca la diferencia. Pero eso no significa que no podamos aprovechar al máximo las bondades del contouring de ojos, ya que el punto de partida sí es fácil de realizar.

Y este no es otro que utilizar a nuestro favor el efecto que producen los colores: los claros elevan y agrandan, mientras que los oscuros hunden y empequeñecen. Si atendemos a esto, deberemos utilizar las sombras claras en la zona del lagrimal para que la mirada se agrande, y bajo la ceja que se vea mayor la zona del ojo en su conjunto. Los colores oscuros, en cambio, se aplican en la cuenca del ojo para darle una mayor profundidad.

Qué colores son los más adecuados

Cuando hablamos de colores claros y oscuros no significa que nos estemos refiriendo al blanco o al negro. De hecho, los expertos no recomiendan utilizarlos cuando estamos buscando un acabado natural. Y es que el poder del maquillaje reside, también en el contouring de ojos, en que no se noten los mecanismos que mejoran nuestra imagen. Solo queremos ver el resultado.

Por eso lo ideal es que elijas sombras en tonalidades marrones y que, dependiendo de tu color de piel y de la ocasión, te muevas en toda su gama, desde el más oscuro al más claro.

En cuanto al tipo de sombra, puedes realizar esta técnica tanto si en en formato polvo o crema e, incluso, mezclar ambos tipos. La única recomendación es que el acabado sea mate, ya que si es en brillo es más difícil que se vea el resultado que buscamos.

En lo referente al eyeliner, puedes utilizarlo uno negro sin problema sobre la línea de pestañas, sobre todo si buscas un maquillaje de noche. En cambio, es mejor descartar el de color blanco con el que a veces dibujamos la línea de agua, y susutituirlo por uno en color beige, más acorde con la tonalidad marrón de las sombras.