Una obra de arte por tarta, dos vestidos y polémica familiar: así fue la boda de Laura Escanes y Risto Mejide

En un fin de semana especialmente candente para la prensa rosa, Laura Escanes y Risto Mejide se han convertido en protagonistas de la actualidad al anunciar su ruptura tras siete años de relación. La influencer y el publicista hacían público en sus respectivos perfiles de Instagram, en tono amistoso y con cuenta atrás de por medio, el fin de su historia de amor, que deja una hija en común, la pequeña Roma. La pareja se conoció en 2015 a través de redes sociales. Pasarían por el altar dos años después, en un enlace no exento de polémica. ¿Cómo fue la boda de Laura y Risto?

Corría mayo de 2017 cuando se casaron en Cataluña, tierra de origen de ambos. La ceremonia, que se realizó por la vía civil, tuvo lugar en una masía catalana del siglo XVI, llamada Mas Cabanyes y situada en el municipio de Argentona. Una edificación de estilo renacentista, rodeada de unos amplísimos jardines en los que trascurrió buena parte de la jornada.

El enlace se convirtió en uno de los eventos vip más destacados de la temporada, al unir a 450 invitados, entre ellos buena parte del panorama instagrammer y televisivo, cuyos looks analizó entonces Nacho Montes para esta web. Una lista de nombres de lo más variopinta, desde Dulceida hasta Luis del Olmo, pasando por Eugenia Martínez de Irujo, Carles Puyol, Mónica Cruz o Virginia Maestro. La pareja firmó una exclusiva entonces con la revista ¡HOLA!, aunque con el tiempo han compartido varias imágenes de dicho día en sus redes sociales.

El menú, el vestido y los mejores momentos de la boda de Laura y Risto

Laura escogió para la ocasión un vestido exclusivo de la firma Rosa Clará, con parte superior de chantilly francés y escote en uve, y falda de tul de seda. Lo complementó con un recogido que dejaba a la vista los impresionantes pendientes de diamantes, topacios y aguamarinas, diseñados por ella misma. La influencer se cambió luego de atuendo, poniéndose otro vestido de la misma firma, más entallado y sin tanto volumen, pero con un cuerpo parecido. Risto optó por un traje de raya diplomática.

Que los invitados se divirtiesen fue el principal objetivo de Mejide y Escanes. Hubo actuaciones a cargo de participantes de 'Got Talent' con quienes había coincidido Risto en su etapa como jurado, fotomatón, monólogos, tarotistas que echaban la suerte a los asistentes, un chéster a modo de photocall como homenaje al programa conducido por el publicista, y hasta hashtag propio (#toelrrato). Los invitados no pudieron sacar fotos con sus móviles, pero sí les permitieron irse "a la francesa" (sin necesidad de despedirse).

Parte fundamental de la ceremonia fueron los respectivos votos que los cónyuges se intercambiaron, y que compartieron en sus perfiles de Instagram. "Sí quiero. Quiero pasar el resto de mi vida contigo. […] Que miremos por nosotros por encima de cualquier cosa y que nada ni nadie pueda destruirnos. […], escribía Laura, cerrando el texto con un “Voy a quererte todos los ratos de mi vida”, una idea que sigue presente en su comunicado de ruptura.

El menú fue encargado a un catering catalán. Se compuso de sopa de almendras con chips de calabaza de primero, olas de merluza con cintas de judía verde y calabacín, y solomillo a la broche con patatas a lo pobre. El postre escogido fue un tiramisú de chicle. El banquete nupcial se remató con una majestuosa tarta vertical, basada en la película ‘Ghost In The Shell’, de 5 metros de ancho y 3 de alto, compuesta de miles de brochetas de hasta quince variedades de dulce.

La ausencia del padre de Laura, una polémica que han arrastrado a lo largo de su relación

La polémica llegó debido a las ausencias. El padre de Laura, Carles Escanes, no acudió al enlace, sin que llegase a trascender el motivo de dicha decisión. Comenzó entonces a generarse una rumorología, que ha acompañado a la pareja durante todos estos años, sobre una supuesta mala relación entre el publicista y su familia política, algo que Escanes ha desmentido de forma reiterada siempre que le han preguntado por ello. Fue su hermano, Albert Escanes, quien la acompañó al altar. A la boda sí acudió Julio, el primogénito de Mejide, fruto de su anterior relación con Ruth Jiménez.