María Villar Villar 28 MAY 2025 - 14:40h.

Tras celebrar la graduación de la infanta Sofía en Gales, la agenda de los reyes, Felipe y Letizia, no para. Este miércoles 28 de mayo los ha llevado hasta el municipio cacereño de Guadalupe, donde se han reunido con el gobierno municipal y han realizado una visita al monasterio de Santa María de Guadalupe. La pintoresca localidad es un punto de peregrinación y más desde que en 1993 fue declarada Conjunto Histórico-Artístico y Patrimonio de la Humanidad. El impresionante monasterio es uno de los puntos que más visitantes atrae y es que además de su belleza gótica, ha sido un enclave que ha formado parte de la historia internacional. La reina ha aprovechado esta visita al municipio cacereño para dejar a un lado los trajes de chaqueta que tanto le hemos visto durante el invierno y estrenar un vestido de primavera con un guiño solidario.

La reina ha apostado por un llamativo diseño de un colorido estampado floral sobre un fondo blanco. Es un clásico vestido camisero con mangas tres cuartos y corte midi con cierre abotonado en el frontal y falda ajustada en la cintura y con bastante vuelo, generado por unos pliegues en la parte superior. El diseño pertenece a Yolanda Guillén, una marca valenciana con tienda en Paiporta, una de las localidades más afectadas por la DANA del pasado octubre. La reina ha aportado un toque personal a la prenda subiendo hacia arriba las mangas de la prenda.

A este diseño se añade un calzado muy típico de la primavera verano, las alpargatas. Es un tipo de zapatos que estamos acostumbrados a ver a la reina Letizia, sobre todo durante sus vacaciones estivales en Mallorca. Eso sí, debido a la dolencia de sus pies, la madre de la princesa Leonor ha tenido que rebajar la altura de estas cuñas, en este caso es un modelo de unos cinco centímetros aproximadamente. Ha completado el look añadiendo más color, con un bolso en tono azul klein de Adolfo Domínguez. Es un bolso de mano con cierre de imán y detalle del logo de la marca en acabado metálico.

Sumó algunos accesorios, como pendientes de la firma Kate Spade, en concreto el modelo Cat Eye, compuesto por tres piedras de diferentes colores -dos tonos azules y un naranja- a juego con la paleta del vestido, es un modelo que ya le hemos visto en otras ocasiones. Llevó su pelo suelto con la raya marcada a un lado y apostó por su maquillaje comodín: ojos ahumados que destacan su pupila verde que combinó con un primaveral labial rosa.

Con la elección de este vestido, la reina confirma que a pesar de que han pasado los meses, su compromiso con dar visibilidad a los negocios afectados por la DANA, que ella misma pudo conocer de primera mano en sus reiteradas visitas a la zona, sigue firme. Durante estos meses, la reina ha llevado, varias prendas de tiendas y firmas afectadas por el desastre natural y también accesorios como pendientes.