La llegada de la señora Hüma a Turquía y su irrupción en la agencia tiene a todo el mundo muy nervioso. Can no soporta su presencia, los empleados de la agencia están muy tensos y Sanem no sabe cómo actuar. Y es que Hüma pretende poner patas arriba la vida de sus hijos.
Después de conocer a Sanem y Leyla y tras mantener una charla con Aylin, la señora Hüma se alía con ella . "Son unas ordinarias y solo les interesa el dinero. Mis hijos son juguetes en manos de esas mujeres pero todo se va a arreglar", le dice Aylin. Ella se encargará de acabar con ellas.
Convencida de que Sanem no es la chica adecuada para su hijo, la señora Hüma critica todo lo que hace. Nada de lo que Sanem representa es de su agrado y está dispuesta a hundirla y destruir su autoestima con el único objetivo de separarla de Can. No lo tendrá fácil. El fotógrafo siempre estará ahí para proteger a su chica. "Deberías limitaros a elegir los colores de vuestro maquillaje. Os habéis pasado cuestionando los colores de la campaña. No os metáis en cosas que no sabéis", le dice a su madre que le reprocha que le, al contrario de lo que siempre ha hecho su padre, él dé poder a una persona que supuestamente no se lo merece. La respuesta de Can es contundente. "Confió en ti como madre".
Mientras todos en la empresa están revolucionados con la presencia de la señora Hüma, Sanem tiene que arreglar sus negocios con Fabri y se ve obligada a acudir a su empresa para solucionar un problema con la fórmula del perfume. Lo que no imagina Sanem es que su secreto está a punto de ser descubierto. Emre la ve al salir de su reunión con el italiano.