Así es Ruth, la hija pequeña de Ronna Keitt y Papuchi, en la actualidad: las fotos inéditas
Ruth es la hermana pequeña del conocido Julio Iglesias, quien acaba de cumplir 19 años y ha vivido una vida alejada de los focos a pesar de la popularidad de su padre
Ronna Keith desvela el motivo por el que 'Papuchi' y ella mantuvieron su boda en secreto: "Es importante"
Han pasado veinte años desde que Julio Iglesias Puga, el célebre ‘Papuchi’, falleció a los 90 años. Con él desapareció también del foco mediático su viuda, Ronna Keitt, quien este 29 de julio ha reaparecido en televisión en el programa ‘TardeAR’. Su historia comenzó en 1990, cuando Ronna, una joven estadounidense de 24 años, conoció al doctor Iglesias, entonces con 72, en el Paseo de la Habana. A pesar de los 48 años de diferencia, iniciaron una relación que mantuvieron en la intimidad durante más de una década. En 2001, se casaron en secreto en Florida, cuando él tenía 85 y ella 38. Fruto de esa unión nacieron dos hijos: Jaime y Ruth. Sin embargo, Papuchi falleció en el año 2005, meses antes del nacimiento de su hija pequeña, a la que no llegó a conocer.
Desde entonces, Ronna eligió el silencio y se centró por completo en la crianza de sus hijos, lejos de los focos. Ahora, por primera vez en casi dos décadas, ha roto su anonimato para hablar del hombre que marcó su vida. En el programa han mostrado cómo han crecido Jaime y Ruth, los hijos más desconocidos del clan Iglesias.
Ruth, la hija pequeña de Ronna Keitt y Papuchi
El programa 'TardeAR' ha mostrado en exclusiva las primeras imágenes actuales de Ruth, la hija pequeña de Julio Iglesias Puga y Ronna Keitt, con motivo de su reciente 19º cumpleaños. En las fotografías, difundidas también por su madre a través de redes sociales, se ve a Ruth posando sonriente junto a una tarta decorada, en una celebración íntima. Son las primeras imágenes públicas desde que era una niña y muestran cómo ha crecido alejada de los focos.
A pesar de su discreción, Ruth ha hablado en televisión sobre su madre y sobre la historia de sus padres: “Mi madre iba para abogada cuando conoció a mi padre en España. No era pobre ni estaba desesperada”, ha declarado, desmintiendo los rumores que han circulado durante años. También ha abordado el tema económico, sin entrar en detalles: “No voy a decir cuánto dinero nos dejó, pero mi padre se aseguró de que su familia estuviera bien cuidada”.
Ruth es amante del cine y de la cultura japonesa. Ha estudiado canto y, aunque de momento no ha seguido la trayectoria artística de su familia paterna, sí llegó a mostrar interés por la medicina. Icluso pedía a su madre visitar el hospital donde trabajó el doctor Iglesias Puga.
El vínculo que tiene con sus hermano, Julio Iglesias
Leticia Requejo ha revelado en 'TardeAR' cómo es la relación actual entre Ruth y sus hermanos por parte de padre. Cuando nació, sí existía contacto entre Ronna Keitt y la familia Iglesias: tras el parto, Ronna llamó a Julio Iglesias y a Miranda. Sin embargo, con el paso del tiempo y por la distancia geográfica y generacional, el vínculo se ha ido diluyendo. “A día de hoy, por las circunstancias de la vida, por el tiempo y por la diferencia, no hay relación”, explicó Requejo.
Aun así, tanto Ruth como su hermano Jaime sí llegaron a compartir momentos con las hijas pequeñas de Julio Iglesias y Miranda Rijnsburger, las gemelas, que serían sus sobrinas. Según el entorno cercano, en la infancia sí hubo algunos encuentros familiares, aunque en la actualidad no mantienen una relación fluida. Ruth, la menor de los cuatro hijos del doctor Iglesias Puga, ha crecido en un entorno muy distinto al de sus hermanos mayores y ha mantenido siempre un perfil discreto, alejada de la exposición pública que rodea al apellido.
La vida de Ronna Keitt lejos de España
Tras la muerte de Julio Iglesias Puga en 2005, Ronna Keitt decidió alejarse de la vida pública y establecerse en Jacksonville, Florida, junto a sus dos hijos, Jaime y Ruth. Desde entonces, ha llevado una vida centrada en la crianza de sus hijos, priorizando su bienestar y educación por encima de cualquier exposición mediática. Aunque en varias ocasiones pensó en regresar a España, optó por quedarse en Estados Unidos para ofrecerles una infancia más tranquila y alejada de la atención pública. Según ha explicado, su deseo era protegerles de la notoriedad que rodeaba el apellido Iglesias.
Ahora, con los hijos ya independizados y estudiando en la universidad, Ronna transita una etapa distinta. Poco a poco ha recuperado espacios personales, retoma aficiones y realiza viajes con más frecuencia. España sigue siendo un lugar emocionalmente significativo para ella y sus hijos, especialmente Galicia y Peñíscola, donde comparten recuerdos del padre y fortalecen vínculos con la familia paterna. Aunque ha vivido en el anonimato durante años, Ronna ha mantenido firme el compromiso de transmitirles a sus hijos la memoria y los valores de su padre.