Ronna, viuda de Papuchi, sobre su vida lejos de España y con sus hijos "independientes": "Vivir la vida para mí"

Tras su reaparición pública después de 20 años, Ronna Keitt ha explicado cómo está siendo su vida tras dejar atrás España y mudarse con sus hijos a Jacksonville
Ronna Keitt rompe su silencio y habla de los 43 años de diferencia con Papuchi: "No se notaba tanto"
Han pasado casi dos décadas desde que Julio Iglesias Puga, conocido como Papuchi, falleció a los 90 años. Con su muerte también desapareció de la esfera pública Ronna Keitt, su viuda y madre de sus dos hijos pequeños, Jaime y Ruth. La historia entre ambos comenzó en Madrid en 1990: ella tenía 24 años, él 72. Pese a los 48 años de diferencia, iniciaron una relación que acabó en boda secreta en 2001, en Florida, donde Papuchi se casó con 85 años y Ronna con 38. La noticia no trascendió hasta meses después del enlace. Ronna, exmodelo estadounidense, mantuvo siempre un perfil discreto y, tras quedarse viuda en 2005, se trasladó a Jacksonville (Florida) con sus hijos, donde ha vivido alejada de los medios.

Este 29 de julio, Ronna ha reaparecido por primera vez en televisión, en el programa 'TardeAR', donde habló de aquel encuentro en el Paseo de la Habana, del amor que compartieron y del hombre que cambió su vida. Reconoce que Papuchi fue su gran amor, que la diferencia de edad nunca fue un problema y que, aunque ha vivido en silencio desde entonces, siempre ha mantenido viva la memoria de su marido para sus hijos.
La vida de Ronna lejos de España
Tras casi veinte años centrada en la crianza de sus hijos, Ronna Keitt, viuda de Julio Iglesias Puga, atraviesa una etapa distinta. En su reaparición televisiva en 'TardeAR', ha explicado que su vida en Florida ha estado marcada por el compromiso con Jaime y Ruth, quienes ya son mayores de edad y cursan estudios universitarios. “Mi vida ha estado más anclada aquí por los niños”, ha reconocido, aunque admite que su deseo siempre fue criarles en España. Sin embargo, considera que haber vivido en Estados Unidos les ha permitido crecer alejados de la atención mediática: “Aquí han podido vivir una vida lejos de lo que es ser los hijos del doctor Iglesias”.

Ronna ha hablado también de lo que significa para los tres volver a España: “Recordamos a su padre más que nada cuando estamos en Peñíscola, cuando vamos a Galicia, cuando estamos con los amigos que son como familia”. Ahora, con sus hijos más independientes, ella empieza una nueva etapa personal. “Tengo un poco más de independencia para hacer cosas y seguir mis pasiones”, ha afirmado. Después de años de discreción y maternidad, asegura que está lista para un cambio: “Estoy en eso ahora, en vivir un poco la vida yo, para mí”.
El legado que ha dejado Papuchi
Papuchi fue, para la opinión pública, un personaje mediático. Para Ronna y sus hijos, fue un hombre reservado, alegre y lleno de vitalidad. Tras su fallecimiento, Ronna se centró en criar a Jaime y Ruth, quienes hoy tienen 19 y 18 años respectivamente. La viuda ha declarado que siempre les ha hablado de su padre, no como una figura pública, sino como un hombre con valores y un carácter cercano. Parte de ese legado ha sido mantener el vínculo con España: han viajado con frecuencia a Galicia y a Peñíscola para conocer el país y a la familia paterna.

Durante su intervención en el programa 'TardeAR', Ronna sostiene que el mayor legado que dejó Papuchi fue su forma de ver la vida: una actitud positiva, sentido del humor y capacidad para adaptarse. No buscaba protagonismo, pero supo convivir con él. Enseñó a su familia a no tomarse las cosas demasiado en serio y a encontrar alegría en lo cotidiano. Según Ronna, fue un hombre pasional, con fe, que vivió con plenitud hasta el final. Aunque sus hijos apenas lo conocieron, ella ha transmitido ese espíritu como una herencia emocional, una forma de ser que los conecta con el hombre que fue, más allá del padre que no pudieron disfrutar por mucho tiempo.