Bodhi, Noah y Journey: así son los hijos de Megan Fox que han sido educados sin estereotipos negativos

Megan Fox es una de las actrices más conocidas de Estados Unidos. La joven, además de por sus películas, también ha destacado por su increíble belleza. Con unas medidas de infarto, una larga melena oscura y unos ojos azules, Megan ha atraído la mirada de todos los expertos.

Megan se casó con Brian Austin Green en 2010 y juntos han tenido tres hijos

Su vida personal también ha sido frenética. Su primera relación se produjo cuando todavía era muy joven y salió un tiempo con un chico de su pueblo que trabajaba como bombero hasta el año 2003. Un año más tarde conoció al que fue, durante un tiempo, el amor de su vida: Brian Austin Green. Ambos coincidieron en el rodaje de una película y en 2006 se comprometieron. Eso sí, poco tiempo después decidieron separarse.

Aún así, en 2010 decidieron darse una segunda oportunidad y al poco tiempo se dieron el ‘sí, quiero’ en una íntima ceremonia en Hawai. En abril de 2012 se confirmó que estaban esperando su primer hijo. Así, en septiembre de ese mismo año, Megan dio la bienvenida a un niño, al que llamaron Noah Shannon Green. En agosto de 2013, la pareja confirmó que volvían a ser padres.

Su segundo hijo, Bodhi Ranson, vino al mundo el 12 de febrero de 2014. En agosto de 2016, y tras un pequeño paréntesis en su relación, tuvieron a su tercer hijo: Journey River. Cuatro años después, Brian confirmó que se había separado de Megan después de un distanciamiento.

Han recibido críticas por la forma de educar a sus hijos

Lo cierto es que, a lo largo de los años, sus tres hijos siempre han sido el mayor apoyo para la actriz. Tras su divorcio, ambos decidieron compartir la custodia de sus retoños, lo que evidenciaba que entre la expareja había muy buena relación.

Tanto Megan como Austin denunciaron, hace tiempo, los comentarios sobre su hijo mayor, después de que se publicara una imagen de este vistiendo un disfraz de Elsa de Frozen. La actriz explicó que las redes sociales son “muy crueles” y que los comentarios sobre si su hijo llevaba falda o vestido no se podían consentir.

Megan ha querido educarlos sin límite en la identidad sexual

Así, en una entrevista, Megan contó que había educado a sus hijos sin ningún tipo de límite en todo lo que se refería a la identidad sexual y había intentado que no se encasillaran en estereotipos negativos. También, argumentó que se había decantado por una crianza no binaria, para proporcionar a sus pequeños un espacio en el que se sintieran seguros y con confianza.