Laura, la hija de Sonia Ferrer, ha crecido mucho: "Dejadme que presuma de su interior"

Laura, la hija de 12 años de Sonia Ferrer, es fruto de su relación con Marco Vricella. En las últimas declaraciones que concedió públicamente, la modelo explicó que no tiene buena relación con su ex, pero tiene relación por la niña que tienen en común. "Tenemos que hablar muchas cosas, hay mucha comunicación. No tenemos una relación cordial, no hay, es una relación necesaria porque somos padres de una niña maravillosa", explicó hace unos días.

La modelo, que se casó con su novio Sergio el pasado 30 de julio, ha pasado la mitad del mes disfrutando de su luna de miel. Y su vuelta, Sonia Ferrer y su ya marido decidieron viajar a Cuba junto a su hija Laura. Es allí donde la modelo se ha dado cuenta del "privilegio" que siente por tener "una personita" que te llama "mamá". "Es una mezcla entre orgullo y responsabilidad que desde hace 12 años me tiene en una montaña rusa. Todo lo que hago y digo desde que nació, son ingredientes que contribuyen a la clase de adulta que acabará siendo y eso, amigos, es el mejor trabajo que jamás tendré entre manos", ha dicho a través de un post que ha compartido en sus redes sociales.

La maternidad no ha sido para ella un camino "fácil". "Hay que estar siempre dispuesta a contestar preguntas incómodas, adelantarse incluso a la mayoría de ellas, tener mucha paciencia, ser ejemplo en absolutamente todo lo que se le exige, poner límites, saber decir no y saber apoyar sin juzgar ni reprochar, respetar sus emociones y mostrar las nuestras sin pudor. Y supongo que algo habré hecho bien porque no puedo sentirme más orgullosa de ella. Y después de este viaje a Cuba, más", ha contado a sus más de cien mil seguidores.

En ese viaje a Cuba, Laura ha visto a su hija "llorar, indignarse, sufrir, emocionarse y enfadarse" por las muchas desigualdades que ha conocido en el país. "Ha reconocido sentirse afortunada por la vida que tiene", asegura su madre tras volver del viaje que ha marcado un antes y un después en la vida de su hija. "Empatía e inteligencia emocional quiero que sea mi mejor aportación en su vida. Para el resto, aquí tendrá siempre mi hombro", ha reflexionado ella.

La modelo ha querido presumir "del interior" de su hija sin enseñar públicamente su cara. Sonia dice que respeta a las personas que sí lo hacen, pero que ella es contrario a que los padres "exhiban a sus hijos en redes sociales". "Ya se mostrará al mundo como considere cuándo tenga la edad de hacerlo", ha querido aclarar a través de su cuenta de Instagram.