María Castro rescata su vestido de novia para la alfombra roja del Festival de Málaga: "No tenía tiempo"

María Castro se ha convertido en una de las protagonistas del Festival de Cine de Málaga. La actriz ha ido relatando durante su viaje el “encaje de bolillos” que ha tenido que hacer para llevar a cabo la conciliación familiar, esa en la que su madre ha tenido un papel fundamental y ha cuidado de la pequeña Olivia, que nació el pasado mes de octubre, durante la alfombra roja y la noche. “La otra mitad de la conciliación, el papá de las criaturas y el abuelo, se han quedado en Madrid. Así es la vida”, explicaba en su llegada a la estación.

Pero su look también la ha convertido en una de las protagonistas de la alfombra roja. Para la ocasión, María Castro ha decidido lucir el vestido de su boda, algo que le ha hecho “mogollón de ilusión”. “En la boda tenía un par de vestidos, uno para la ceremonia y otro para el baile, como más informal muy romántico”, explicaba. La actriz se ha visto obligada a “rescatarlo” porque no ha tenido tiempo de ir a los ‘showroom’ en los que eligen los vestidos de gala para este tipo de eventos. “He dicho: ‘pues este, que no lo ha visto nadie’. Los zapatitos también son los de mi boda”, confesaba.

La intérprete ha ido más allá y cuando ya estaba arreglada ha mandado públicamente un mensaje a su marido, José Manuel Villalba, que se ha quedado en la capital cuidado de su hija mayor. “Aquí está el vestido de la boda, el segundo, el del baile. Mira esta cola tan preciosa que acabó hecha un nudo por hacer el porté de ‘Dirty Dancing’, pero mereció la pena la causa. ¿Qué te parece? ¡Está impecable!”, le preguntaba.

María Castro se sincera sobre la maternidad

Además de actriz, ella se define como “mami a tiempo completo”. A través de sus redes sociales, María Castro relata de una forma muy natural las dos caras de la maternidad, la parte positiva y la que en ocasiones no lo es tanto. El cansancio, la conciliación, la falta de sueño y la falta de tiempo son algunas de las cosas que recalca de forma diaria.

Pero también la parte buena, la felicidad que le ha producido ser madre por partida doble. “Me veo bien, feliz y plena. ¿Igual de eso va la maternidad, no? De que tus ojeras aumenten proporcionalmente al ritmo de su sonrisa”, decía a través de su perfil de Instagram, donde acumula más de setecientos mil seguidores.