{{#section.link.href}}
{{section.link.title}}
{{/section.link.href}}
Tamara Falcó parece estar en una de las etapas más dulces de su vida tras haber vivido sus meses más complicados. La celebritie ha comenzado una relación con Íñigo Onieva, un diseñador de coches madrileño y hermano de la popular actriz Alejandra Onieva. Desde que la noticia saliera a la luz, ambos pasaban a ser directamente la pareja del momento, siendo perseguidos por la prensa en cada uno de los planes que realizan en búsqueda de declaraciones o imágenes que atestiguaran que la marquesa de Griñón estaba ilusionada de este joven de 31 años. Y si bien es cierto que ya hemos podido comprobar algunos gestos cómplices y besos entre ellos, también hemos contemplado como ambos se saltaban el confinamiento de forma reiterada para hacer planes con amigos. Por este motivo, la diseñadora ha querido hablar por primera vez sobre su idilio y ha pedido perdón por su comportamiento.
La colaboradora se sentaba en el programa donde participa semanalmente y se disculpaba frente a las cámaras por haberse saltado las normas sanitarias impuestas para evitar nuevos contagios. “Quiero pedir públicamente perdón porque es verdad que el martes fui a cenar a La Moraleja”, se sinceraba. Hay que recordar que Falcó reside en Puerta de Hierro -una zona exenta de restricciones-, pero su pareja vive en este barrio que presenta limitaciones de movilidad desde el pasado mes de noviembre, por lo que ella no podría acceder sin disponer de una motivo de peso –como acudir a una cita médica o a tu puesto de trabajo-.
La diseñadora se justificaba explicando que al final “no te enteras de los sitios que están confinados y los que no” y comentaba que otra vez fue pillada saltándose el toque de queda porque estaba esperando que la prensa se fuese para poder salir. “Retrasé mi salida a propósito. Abrí la puerta para salir y ahí estaban todos. Y entonces se lio”, rememoraba lo ocurrido.
De la misma forma, Tamara ha admitido que se lleva francamente bien con todos los reporteros y fotógrafos, pero que hay momentos -como ahora “que está empezando una relación”- que es “un poco agobiante”. De esta manera, la aristócrata comenzaba a hablar sin tapujos de su actual novio, datando su noviazgo en septiembre y manifestando que ya tienen amigos que intuyen que “suenan campanas de boda para diciembre”, algo que agobia a la vip: “es un poco estresante el tema”.
Hijo de la estilosa empresaria Carolina Molas y el mayor de 5 hermanos, Íñigo pertenecía al mismo grupo de amigos que Falcó antes de que saltara la chispa entre ambos, realizando diferentes escapadas juntos –la última a Extremadura, antes de que empezara la crisis del coronavirus- como se puede constatar en las redes sociales del ingeniero. El siglo XXI nos ha dado la oportunidad de conocer a la gente un poco más gracias a los perfiles de Instagram, y gracias a esto hemos podido profundizar un poco más sobre la vida de este ingeniero.
Apasionado de los viajes, los animales y los coches –algo que viene implícito en su profesión-, Onieva tiene una frase favorita que define su filosofía de vida: “ahora o nunca”. Además es un amante de los deportes, practicando esquí o surf, tal y como reflejan la mayoría de sus posts. Lejos de sentir la angustia de una fama que ha llegado de forma tan abrupta como desmesurada, el hombre más buscado de las últimas semanas parece haber canalizado bien la situación, manteniendo sus redes sociales abiertas. De ahí que el contador de sus followers no haya parado de subir.