Dinero e influencers: Dulceida habla sin tapujos de lo que se cobra en Instagram

  • ¿Cuánto cobra Dulceida? La influencer habla sin tapujos de cómo se mueve el dinero en Instagram

El dinero, ese tema tabú del que todo el mundo quiere saber más, por mucha mala educación que implique la pregunta. Y si la cantidad que se cobra es importante, la curiosidad se multiplica. Los influencers, que normalmente encajan con esta última casuística, están acostumbrados a esquivar cuestiones al respecto. Trabajos en apariencia banales, importantes contratos por acciones poco palpables... El hecho de que los creadores de contenido no estén de ocho a seis en una oficina suscita muchas dudas sobre su sueldo, en algunos casos envidias. Por eso es gratificante que rostros como Dulceida, una de las pioneras, se sienten ante la cámara para zanjar dudas y hablar claro al respecto. ¿O es que se nos ha olvidado lo gratificante que es alegrarse de los éxitos de los demás?

Aida Domenech, su nombre real, empezó en redes en 2008, creó su blog en 2009 y comenzó a monetizarlo en 2010. Se hizo influencer (antes incluso de que existiese la palabra) cuando cayó en la cuenta de que algunas marcas se estaban forrando cada vez que ella las mencionaba y ella a cambio solo recibía un zapato. Esa labor de publicidad personalizada, de tú a tú, merecía ser cobrada. Y así fue como se creó una de las profesiones a las que muchos desearían aspirar.

¿En qué consiste el trabajo de Dulceida? Así gestiona las colaboraciones con marcas

En la actualidad, tal y como ha explicado ella misma en su último vídeo de Youtube, un 80% de lo que comparte en su Instagram no es remunerado. Es su día a día, contenido cuyo único fin es entretener y crear comunidad. En el 20% restante es donde entran en juego las marcas, que normalmente contactan a la influencer en sí para hacer una colaboración. A veces es un post, pero lo más habitual es que se trate de una campaña a largo plazo que implica varias acciones.

"Si yo no tengo ingresos no puedo estar las 24 horas creando contenido. Es imposible. No podría pagar nada. Muchas veces alguien se queja de que estés haciendo publicidad. ¿Qué problema hay con eso? Yo no te estoy obligando a que te lo compres. Si crees que un producto que tengo te puede funcionar, adelante. Yo recomiendo de la misma manera si me pagan o no", ha defendido Dulceida en su canal.

Aunque puede estar dos días sin trabajar (algo que, según ella, le genera "agobio"), mucho otros días está hasta las 22 horas trabajando mano a mano con su representante y su jefe de prensa. Los tres se encargan de presupuestar cada campaña, decir sí o no a las propuestas concretas, plasmar en un contrato cada una de las acciones que implica la colaboración... Pero antes de eso, su requisito fundamental es que la marca sea afín a ella.

Los influencers no lo tienen todo gratis: las excepciones

"La única vez que he hecho algo con un producto que no era mucho de mi agrado ha resultado ser una de las cosas más guays que he hecho. Hace muchos años hice una acción con una marca de horchata. En un principio dije que no. Me han ofrecido trabajos por mucho dinero y siempre he dicho que no. Pero aquí me ganó la experiencia". Con esta salvedad, Dulceida ve su relación con las marcas con la misma naturalidad que consumimos un anuncio en televisión. "En nuestro caso es mucho más cercano y, como somos personas, lo lógico es que sean cosas que te gusten", ha argumentado.

En unos meses será obligatorio indicar en Instagram cuándo estás haciendo una publicidad, concretamente cuando estás cobrando por ella. Según Aida, casi siempre que le preguntan la famosa frase de 'dónde te has comprado tal cosa', ella pone el link a la web y menciona a la marca de forma gratuita. A su casa recibe decenas de paquetes al día de firmas que querrían colaborar con ella o que yo han tenido experiencias previas, pero para ella es imposible publicitarlo todo. "Para mí no son regalos, y no me gusta parecer la teletienda. Yo intento no hacerlo, me organizo para no promocionar varias veces en el mismo día".

¿Cuánto cobra por su trabajo en Instagram?

¿Lo tienen todo gratis? Aunque lo parezca, no. "En Fashion Week, por ejemplo, nos lo pagamos todo nosotros. Si quieres ir a los desfiles y la marca te quiere invitar, tú te pagas tus vuelos o el hotel", ha dejado claro. Y para terminar, la pregunta del millón. ¿Cuánto cobra?. "No voy a decir lo que gano o lo que dejo de ganar. A nadie le debería de interesar. Cada persona tiene su caché. Depende de la campaña pides una cosa u otra. Hago muchas cosas gratuitas por apoyar marcas pequeñas. Hay unas tarifas estándar, pero siempre depende de la marca y de la acción", ha respondido.