La imagen de Lily Collins en la Semana de la Moda en Nueva York que ha preocupado a sus seguidores

Lily Collins, la actriz británico-estadounidense de 36 años conocida internacionalmente por su papel en 'Emily in Paris', volvió a captar todas las miradas durante la Semana de la Moda de Nueva York. Collins eligió un conjunto de dos piezas blanco de Calvin Klein adornado con lentejuelas y plumas, que dejaba al descubierto su abdomen y brazos. Su aparición, elegante y sofisticada, no pasó desapercibida y rápidamente se difundieron imágenes en redes sociales que provocaron la atención y los comentarios de sus seguidores.

Actualmente, la hija de Phil Collins ha sido madre por primera vez el pasado febrero a través de gestación subrogada junto a su marido Charlie McDowell y ya mantiene una carrera consolidada.

La preocupación de los fans por su delgadez

La elección del atuendo permitió que se apreciara con claridad la figura de Lily Collins, y no todos los comentarios fueron halagos. Muchos seguidores mostraron inquietud por su extrema delgadez, expresando su temor en mensajes dirigidos a la actriz. Algunos pidieron explícitamente que prestara atención a su salud y alimentación, mientras otros recordaron que Collins ha enfrentado problemas relacionados con su peso en el pasado. La combinación de un top y falda que dejaba a la vista su cintura y abdomen generó que la conversación sobre su físico se viralizara rápidamente.

Frases como "Lily… ¡Come algo!" o "Espero que estés bien" reflejan la preocupación genuina de los fans. Aunque Collins luce radiante y segura, las imágenes despertaron recuerdos sobre su historial de trastornos alimenticios y su lucha por mantener un equilibrio saludable en su vida personal y profesional.

Una vida marcada por los trastornos alimenticios

Lily Collins no es ajena a los problemas relacionados con la alimentación. Durante su adolescencia enfrentó un trastorno alimenticio que marcó una etapa difícil de su vida. La actriz ha hablado públicamente sobre cómo esta experiencia afectó su salud física y emocional, incluyendo problemas como pérdida de menstruación, cabello y uñas quebradizas, y un desgaste general que le generaba miedo sobre sus posibilidades de ser madre en el futuro.

Su experiencia con la anorexia incluso inspiró su papel en la película de Netflix, 'Hasta los huesos', donde abordó de manera directa el impacto de este trastorno. Además, ha relatado cómo la terapia y el apoyo de su entorno, especialmente de su marido Charlie McDowell, fueron fundamentales para superar estas dificultades y encontrar un equilibrio emocional y físico.

Collins también ha compartido que ha lidiado con el síndrome del impostor, una sensación de no merecer sus logros y que afecta su autoestima. Sin embargo, con la terapia y el acompañamiento de sus seres queridos, ha logrado centrarse en lo que considera importante: su familia, sus relaciones y su bienestar personal.