El plan de vida de Joaquín Sabina tras su jubilación a los 76 años: "Me llena más que subirme a un escenario"

Joaquín Sabina ha dado el último concierto de su carrera en el Movistar Arena, en Madrid, a sus 76 años
El artista contó hace unos meses cuáles son sus planes de vida al retirarse tras más de cinco décadas sobre los escenarios
En la noche de este domingo 30 de noviembre, Joaquín Sabina daba en el Movistar Arena de Madrid el último concierto de su carrera. En el concierto número 71 de su gira 'Hola y adiós', el artista ponía fin a más de cinco décadas dedicadas a la música. "Este concierto en Madrid es el último de mi vida y por lo tanto es el más importante porque es el que voy a recordar", dijo sobre el escenario. A esta cita no faltaron rostros conocidos como el matrimonio formado por Amaia Salamanca y Rosauro Varo, Iñaki López y Andrea Ropero, Carles Francino y su mujer, Gema Muñoz, entre otros famosos. El artista comienza ahora una vida alejada de los escenarios y centrada en su familia, que está formada por su mujer, Jimena Coronado, y sus dos hijas, Carmela y Rocío, que son fruto de su relación pasada con Isabel Oliart.

"Esta gira se llamaba 'Hola y Adiós', esta noche se llama solo adiós, es un adiós enormemente agradecido, porque he visto cómo han crecido mis canciones y han conseguido colarse en la memoria sentimental de varias generaciones, sin vosotros las canciones no existen, gracias eternas", aseguró el artista en el que ha sido su último concierto.
En la cuenta oficial de Instagram que lleva su nombre, el artista decía hace unas horas que ha sido un adiós "enormemente agradecido" porque ha ido viendo, "al vivir y al viajar", cómo sus canciones han viajado y crecido. "Y cómo han conseguido, de un modo misterioso, colarse en la memoria sentimental de varias generaciones. Todo eso tengo que agradecéroslo a vosotros, porque sin vosotros las canciones no existirían. Gracias eternas", aseguraba.
La casa de Joaquín Sabina, el refugio de su fama y su plan de futuro
La revista Esquire publica ahora una entrevista que le hicieron al artista antes de su adiós en el Madison Square Garden, el último concierto que ofreció en Nueva York hace unos meses. El artista desveló en esas declaraciones que, en los últimos años, ha sido "un coleccionista muy atento" y tiene en casa sus libros. "De hecho, aquí en la librería más importante de Nueva York tengo encargados un par de libros que me traerá mañana la Jime. Quiero estar en casa, leyendo y pintando. Además ya no salgo, no voy a ningún sitio hace mucho tiempo", dijo sobre la vida que quería tras bajarse de manera definitiva del escenario.

Esa vida más casera de no salir a ningún sitio fue a raíz de la fama. "Mi modo de escribir era en los bares a las tres de la mañana, no me importaba que estuviera lleno de gente siempre que a mí me dejaran tranquilo, y eso hubo un momento en el que ya no fue posible. Entonces me encerré en mi casa", dijo al medio citado.
De la música al "disfrute personal" que llega con su jubilación
El cantante comentó que quería pasar de la música al "disfrute personal" y a vivir de una manera "más tranquila y más introspectiva". "Leer, pintar, observar el mundo desde la ventana de mi casa… eso me llena ahora mismo más que subirme a un escenario", dijo a sus 76 años.
