Cómo recuperar los rizos después de dormir
El secreto para recuperar los rizos está en reactivar los productos de la rutina del día anterior mediante la hidratación superficial del cabello
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El cabello rizado tiene un lenguaje propio dentro del mundo capilar, porque adiferencia del liso o el ondulado, tiende a ser más seco y frágil y con una estructura en espiral que dificulta la distribución natural del sebo desde el cuero cabelludo hasta las puntas, una característica que le otorga su volumen y personalidad, pero que también exige cuidados específicos con productos más hidratantes, técnicas menos agresivas y una rutina propia.
Para llegar a tener un cabello rizado sano, brillante y bonito, es imprescindible conocer cuáles son sus necesidades concretas, porque no solo requiere mayor aporte de hidratación que un pelo liso, sino que exige una dosis adecuada de proteínas para que mantenga su elasticidad, aunque el exceso puede hacer que el pelo se vuelva áspero y se rompa con facilidad.
Los productos más efectivos para el pelo rizado son aquellos que respetan la estructura natural del rizo y evitan ingredientes que lo resecan. Los champús sin sulfatos, los acondicionadores ricos en aceites naturales (como el de coco, argán o jojoba) y los tratamientos ‘leave-in’ son aliados indispensables. Por el contrario, los productos con alcoholes secantes, siliconas no solubles y sulfatos fuertes deben quedar fuera de su alcance. Estas sustancias pueden eliminar los aceites naturales del cabello, provocando encrespamiento y pérdida de definición.
La nutrición también juega un papel esencial. Los rizos necesitan una combinación equilibrada de hidratación (agua y humectantes) y nutrición (grasas y aceites) para mantenerse elásticos y con brillo. En cuanto al lavado, la frecuencia depende del tipo de rizo y del estilo de vida, pero la mayoría de especialistas recomienda espaciarlo entre dos y tres veces por semana para evitar que el cabello pierda sus aceites naturales. Entre lavados, una práctica cada vez más popular entre las chicas curly es el ‘refresh’, una técnica que permite devolver la forma y vitalidad al rizo sin tener que pasar por una ducha completa.
El refresh: agua, leave-in y definición
Después de dormir, los rizos suelen amanecer aplastados, sin forma o con frizz, especialmente si no se ha utilizado una funda o gorro de satén o seda, que son tejidos que reducen la fricción con el cabello, sin embargo, esto no significa que haya que volver a lavarlo para que recuperen su forma y definición. El secreto está en reactivar los productos de la rutina del día anterior mediante la hidratación superficial del cabello.
El método más sencillo y efectivo es el del pulverizador y el leave-in. Consiste en rociar el cabello con agua, preferiblemente filtrada o mineral, para humedecerlo sin llegar a empaparlo. La idea no es mojarlo completamente, sino devolverle la humedad suficiente para que los rizos recuperen su elasticidad. A continuación, se aplica una pequeña cantidad de 'leave-in conditioner' (acondicionador sin aclarado), distribuyéndolo con las manos o usando un cepillo específico, para luego activar los rizos mediante la técnica del ‘scrunch’, es decir, apretando los rizos desde puntas hacia arriba. También se puede añadir un poco de gel o mousse ligera para sellar la hidratación y mantener la definición durante todo el día.
La elección del tipo leave-in va depender tanto del tipo de rizo, como del tipo de cabello. Si el cabello es fino y la onda suave, se debe apostar por productos ligeros con ingredientes como el aloe vera o la glicerina; por el contrario, si el cabello es grueso y el rizo muy marcado, soporta productos más densos ricos en manteca de karité o aceite de aguacate.
Este paso reactiva los productos del día anterior y redefine la forma natural del rizo sin apelmazarlo. Se puede dejar secar al aire o con aplicando calor con un difusor a baja temperatura.Es conveniente adaptar el tipo de ‘refresh’ a las necesidades del cabello y si está muy seco, es aconsejable añadir al agua del pulverizador unas gotas de aceite ligero que aporte hidratación y evite el encrespamiento.