Massumeh, la experta persa que cuida la piel de Letizia, Cristiano y Preysler

Esther López 13/10/2014 23:06

Decenas de retratos con dedicatoria colocados en marcos reciben al recién llegado en la sede de Massumeh en Madrid. Farah Diba, Cristiano Ronaldo, Isabel Preysler son algunos de los clientes que aparecen, o "amigos", como les gusta a madre e hija denominarles. "La Familia Real mejor no la saques en foto, son muy estrictos con la seguridad", piden.

"Nos importa mucho que nuestras amigas queden contentas y vean los resultados, porque ellas se lo recomendarán a las suyas”, explica Massi, la madre, quien empezó su carrera en Marbella con la familia real saudí y luego también con la kuwaití. "Ellas la recomendaron a su gente de confianza y a Isabel Preysler y así empezó todo", nos cuenta su hija Nasrin, que ha estudiado bioquímica en Estado Unidos y ha vivido en Londres varios años. "Unimos lo mejor del oriente con lo mejor de occidente: ese es quizá nuestro secreto", añade.

Más tarde llegaron las cremas de composición propia, realizadas en Suiza por un equipo de su confianza. Se fijaron en las principales demandas de sus primeras vip y se propusieron crear su propia línea de tratamientos. Insisten mucho en que no son médicos y que cuando una piel tiene problemas serios la derivan al dermatólogo. Pero sí pueden ayudar a luchar contra los estragos que el maquillaje hace en el cutis de las actrices, preparar una piel para una sesión de fotos concreta o rejuvenecer una epidermis. "La mujer persa siempre se ha cuidado mucho el cutis. Le importa menos otras cosas, como el sobrepeso, pero sí le interesa mucho tener una piel sana y bella. No toma el sol, cuida su alimentación, prepara mascarillas, se cuida el pelo… viene del tiempo de los arenes: querían mantenerse joven porque el hombre podía casarse varias veces", explican.

-¿Cómo es la piel de las españolas?

Hace muy poco que las españolas se protegen del sol. Es una lucha continua, estamos siempre subrayando esto. El daño solar es acumulativo y a las mujeres españolas no les entra mucho en la cabeza que aquí hay que cuidarse todo el año del sol, también en invierno. En Inglaterra tienen otros problemas, pero en España una crema de día que no tenga protección solar no puede ser antiedad.

-¿Nos hidratamos bien?

En general, se puede mejorar. En Sudamérica las mujeres también se cuidan muchísimo, nunca toman el sol. Puedes estar morena pero protegida, pero a las españolas esto aún les cuesta. La protección no bloquea el sol, pero controla el posible daño.

-¿Ves la piel de alguien y en un minuto sabes lo que come?

Sí, la mayoría de las veces. Veo si come frutas y verduras, si lleva una temporada de estrés, si se cuida o no, si ha bajado peso en los últimos meses… No somos médicos nutricionistas, pero lo que comes se nota. Y mucho.

-¿A partir de qué edad hay que cuidarse especialmente el rostro?

Lo mejor es prevenir. Y eso se puede hacer desde la niñez. Hidratarse después de la ducha, tener cuidado con el primer acné y la sensibilidad… así previenes manchas, arrugas y sequedad. Depende de cada piel. Anti-edad es prevenir en realidad. En España se hace mucho deporte (natación, caminar al aire libre, esquí…) y entonces hay que cuidarse de antes que una mujer de centro Europa.

-Tres cosas que nunca falten en tu neceser…

Al viajar se reseca y se cansa mucho la piel, así que elegiría crema de contorno de ojos, anti-age vitaminas para el resto de la cara y reafirmante para quitar la sensación de cansancio. No viajaría sin eso, seguro.

-Tres consejos para cuidarse a diario…

La gente cree que puede limpiarse el rostro con cualquier cosa y luego darse una crema cara… y no. El limpiador por ejemplo es muy importante: que deje la zona limpia pero sin alterar el ph ni deshidratar. Luego, protegerse del sol. Y mantener la piel hidratada.

-Y tres errores…

Lo mismo, pero al revés. El daño es acumulativo, así que si tienes la piel seca a los 18, ¿quién dice que tienes que esperar a los 25 para hidratártela? Diría como tres errores graves, así en general, el hecho de no protegerse del sol, no limpiarte con producto adecuado y no hidratar bien.

-También tenéis tratamientos de cuello y escote… ¿existen los mismos problemas en esas zonas?

Mucho más, son los grandes olvidados incluso para las mujeres que se cuidan. Se dan hidratante, pero se olvidan del sol. También en las manos. Además, si han tenido algún retoque, es una zona que cuesta mantener compensada con el resto del rostro.

-¿Os invitan a sus fiestas y a sus bodas

Con algunas de ellas sí. Pero no nos gusta hablar de estas cosas en concreto. Sabemos además que ellas agradecen la discreción.

-¿Todas ellas se toman bien vuestros consejos o ha habido alguna que no?

Estamos aquí para ayudar, así que siempre se lo toman bien. Si mencionamos que necesita hidratarse o luchar contra la sensibilidad o lo que sea, es porque sabemos cómo podemos intentar solucionarlo. No estamos para añadir preocupaciones a las que ya de por sí tiene la vida. Nuestras clientas siempre tienen que quedar contentas y ver resultados, porque ellas se lo recomenzarán a su vez a otras amigas. Nuestro modo de trabajar siempre ha sido el boca a boca, no invertimos casi nada en publicidad. Además, nuestra cultura persa siempre tiene muy en cuenta que cuando alguien viene a verte, está en tu casa y es tu invitado… y tiene que sentirse bien. Cuando alguien viene, tiene que estar segura que va a mejorar.

-¿Y los hombres necesitan lo mismo?

Cada vez más su imagen les importa. Y cada vez más se cuidan. Muchos siguen queriendo una crema para todo, pero otros siguen muy bien nuestros consejos y lo notan.

-Por ejemplo, cuando ha venido Cristiano Ronaldo…

No podemos hablar de eso. La gente que tratamos valora mucho su intimidad...

-¿Vienen las hijas y los hijos de vuestras 'amigas'?

Muchos. Algunas desde los trece años, que les empiezan a salir granitos. Prevenir es muy fácil, pero hay que contarlo bien. Prefiero cuando viene una pequeña amiga desde el principio con sus granitos, porque si ha usado otros cuidados antes que no les ha ido bien, quizá tenga que deshacer el camino. Hay algunos productos que producen sensibilidad además de los granos, así que antes tengo que tratar eso. Cuando vienen hablo con ellas sin sus madres, para que me cuenten de verdad las cosas y cómo se cuidan. Es una relación nuestra.

-¿La arruga es bella?

(Silencio y luego risas) Eso dicen, es bella si es de una persona se ha reído mucho a lo largo de su vida… pero hay otras de enfadados que no. No puedo decir que me gusten mucho las arrugas, eso es verdad (risas).