De Kate Moss a Cindy Crawford: los vestidos de novia más icónicos que no podemos olvidar

No nos perdemos las últimas tendencias en vestidos de novia bajo ningún concepto. Nos encanta descubrir nuevos estilos y posibilidades temporada tras temporada, y comprobar cómo las propuestas de los diseñadores y la personalidad de cada novia nos enamoran constantemente. Pero más allá de las novedades, hay vestidos de novia que no olvidamos con el paso de los años. Sus diseños son ya parte de la historia, y no nos cansamos de revisarlos una y otra vez, ya sea por puro placer o como fuente de inspiración. ¡No te los pierdas!

Kate Middleton

La duquesa de Cambridge es una de las royals más elegantes del planeta, y el día de su boda no decepcionó lo más mínimo con un vestido que ya ha hecho historia. El diseño era de Alexander McQueen, a cargo de Sarah Burton, la directora creativa de la firma. Era un vestido con corpiño de satén, lazos en la parte trasera y una cola de 2,73 de longitud. La tiara que remataba el conjunto era de Cartier de 1936.

Diana de Gales

El vestido que llevaba en 1981 Diana de Gales para su boda con el ahora rey de Inglaterra es un icono de los vestidos de novia. El modelo de David and Elizabeth Emanuel estaba confeccionado en tafetán de seda, con muchos volantes, encajes, lentejuelas, bordados y unas 10.000 perlas diminutas. Las mangas abullonadas, la gran falda y la cola de 8 metros de longitud son parte de la historia de las bodas reales. 

Kate Moss

El estilo y la personalidad de la supermodelo causan fascinación desde hace décadas, por lo que no podíamos pasar por alto su vestido de novia. Diseñado por su amigo Galliano y de aire boho, tenía un precioso color champán. Fue fiel a su melena natural y al eyeliner negro con el que suele maquillarse. El precioso velo fue diseñado por Stella McCartney.

Elizabeth Taylor

Ocho veces se casó Elizabeth Taylor, pero hoy queremos recordar el vestido que llevó en su segunda boda con Richard Burton, su quinto marido. Para esta ocasión acertó con un vestido de gasa de color amarillo, con cuello redondo, diseñado por Irene Sharaff. La diseñadora había sido también la encargada del vestuario de Cleopatra, la película en las dos estrellas se conocieron. El tocado que eligió la novia era una verdadera preciosidad, formado por lirios del valle y jacintos blancos. Y la joya para la ocasión fue un broche de esmeraldas y diamantes de Bulgari.

Cindy Crawford

Solo una supermodelo como Cindy Crawford podía crear tendencia con una elección así para su boda con el empresario Rande Gerber en 1998. Se casaron en una ceremonia íntima en la playa, y ella se eligió un sencillo vestido lencero diseñado por Galliano. Era un slip dress mini, con encaje en el escote y la parte inferior. El pelo suelto y ondulado, con un maquillaje de lo más natural, la convirtieron en la novia más sexy de la historia. 

Bianca Jagger

Para casarse con el líder de los Rolling Stones, Bianca eligió un modelo que aún hoy nos deja con la boca abierta. Un traje de chaqueta y falda en color marfil de Yves Saint Laurent, con pamela y sandalias a juego. El pelo ondulado y el atrevido escote hicieron el resto para que en su gran día fuera una novia original, elegante, sensual y que desprendía una gran personalidad.