La princesa Leonor, a sus 17 años, sonríe con total naturalidad frente a los medios y en su vida cotidiana. Su frescura ha dejado ver que a la joven heredera le faltan los colmillos superiores. Al estar bajo el punto de mira de la prensa todo el tiempo, este detalle no se le ha escapado a los más observadores, y muchos se preguntan a qué se debe que le falten estos dientes. Antes de la pandemia, posiblemente la princesa tenía sus colmillos de leche, pero al caerse no crecieron los permanentes, algo que posiblemente ha ocurrido mientras el uso de la mascarilla era obligatorio, y hasta hace poco nadie se había dado cuenta.
La ausencia o falta de desarrollo de un o varios dientes se conoce como agenesia dental, y esta anomalía es la que sufre en su dentición la princesa Leonor. Puede darse en los dientes de leche o en los dientes permanentes, y esto último es lo que parece ocurrirle a ella. Puede darse en cualquier diente, pero lo más habitual es que ocurra con las muelas del juicio, los premolares y los incisivos. En el caso de la princesa Leonor, la agenesia se ha producido en los colmillos.
Se trata de una anomalía de carácter genético y hereditario, por lo general. Por lo que es muy posible que otros miembros de su familia les falten o hayan faltado piezas dentales, aunque no sean los colmillos como a ella. También se puede producir cuando ha habido infecciones durante el embarazo. Y a veces, se producen obstrucciones o hay falta de espacio en alguna cavidad oral que impide que un diente se forme, por lo que se queda atrapado en el maxilar.
Para tratar la agenesia dental hay que tener en cuenta cada caso, valorarlo y hacer un buen diagnóstico, en el que se tenga en cuenta cuáles son las causas de la fala de dientes y el estado en el que se encuentra el paciente. Dependiendo del caso puede realizarse una ortodoncia o tener que recurrir a los implantes.
Aún es algo pronto para decirlo, ya que hasta que no se ha concluido el desarrollo no se deben poner implantes. Y esto, más que a los 18 años, sucede plenamente casi a los 25 años. Por lo tanto, lo previsible es que en estos momentos se esté tratando mediante la ortodoncia, y habrá tiempo de plantearse una opción definitiva mediante implantes.