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Beber agua con limón en ayunas es un hábito que muchas personas siguen a rajatabla cada día. Si no te encuentras dentro de ese grupo, seguro que tienes a alguien cercano que en más de una ocasión te ha hablado de las bondades de esta bebida para la salud. El motivo de que despierte tantas pasiones se debe a sus supuestos beneficios para el organismo.
Pero lo cierto es que, según los expertos, parece no haber tanta verdad tras esta popular creencia. Es más, beber agua con limón en ayunas tiene contraindicaciones que no debemos pasar por alto. Te contamos cuáles son, y cuáles son las propiedades milagrosas que se le atribuye al zumo mañanero más con más adeptos.
Son numerosos y ninguno de ellos cuenta con un respaldo médico que haga que el agua con limón sea una bebida indispensable para nuestra salud. Se le atribuye, por ejemplo, la capacidad de destruir la grasa corporal y ayudarnos a adelgazar. Pues bien, si eres de las que pensaba que esto era así, te aseguramos que más vale que prestes atención a tu alimentación de forma global y que hagas ejercicio si lo que quieres es perder grasa. Porque lo cierto es que un limón en agua no va a hacer nada por ayudarte a conseguirlo (aunque no sea, ni mucho menos, un impedimento).
Relacionado con esto, la fiebre por las dietas detox para limpiar el organismo tiene entre sus bebidas de referencia el agua con limón por la mañana. Volvemos a lo mismo: come de manera saludable, y tu organismo se encargará el solo de desintoxicarse porque está programado para ello (por suerte).
Como cítrico, es cierto que el limón nos aporta vitamina C, pero no lo hace en mayor cantidad que otras frutas, como la naranja, el kiwi o la piña, que podemos tomar en cualquier momento del día y sin necesidad de diluir en agua.
En cuanto a que combate el estreñimiento, el limón no tiene nada que ver en esto. Es el agua la que ayuda a que el intestino trabaje como debe, sobre todo si la tomas tibia. Así que añadir limón solo hace que darle sabor.
Por último, se dice que el agua con limón regula el Ph del organismo y que es una bebida esencial cuando se sigue una dieta alcalina. Hay numerosos alimentos que tienen estas propiedades, como la carne o los lácteos, que puedes incluir en tu dieta de manera natural, ya que ese limón de la mañana no tiene un efecto relevante para acidificar o alcalinizar el cuerpo. Es decir, bebe agua con limón en ayunas si te gusta y te apetece, pero no esperes que haga milagros en tu salud o en tu peso. Y de paso, ten en cuenta las contraindicaciones que te indicamos a continuación.
El limón activa una enzima estomacal, la pepsina, que puede provocar reflujos, acidez, ardor y úlceras. Si notas molestias en el estómago tras tomar el agua con limón, te recomendamos que dejes de tomarla durante una semana para observar si los síntomas mejoran o desaparecen. En el caso de que padezcas reflujo gastroesofágico o hernia de hiato, el agua con limón está contraindicada.
Los ácidos del limón corroen el esmalte dental, lo que afecta a tu dentadura. Si no quieres renunciar a tu vaso de agua con limón por las mañanas, procura lavarte los dientes o enjuagarte con agua después. Además, una vez exprimido, los azúcares del limón quedan liberados y se enfrentan directamente a tus dientes, pudiendo aumentar el riesgo de padecer caries.
El limón es rico en vitamina C, y si tomas demasiada cantidad de esta fruta o de otros cítricos a lo largo del día, el cuerpo puede reaccionar con dolores de cabeza. De hecho, se asocia el consumo de cítricos a las migrañas, por lo que si las padeces la recomendación es priorizar otro tipo de fruta.