¿Cómo hacer el Tamago Sando? Así es la receta del sándwich japonés con huevo alto en proteína del que todos hablan

Así de sencillo es preparar el conocido sándwich japonés que ya es viral en redes en el que el ingrediente estrella es el huevo
La receta de ensalada de Dani García con higos, producto de la temporada, tomate y queso Edam
Durante años, cenar un bocadillo estuvo vinculado a la idea de improvisación y de un plato poco equilibrado. Sin embargo, la tendencia ha cambiado: con una buena elección de ingredientes, un sándwich puede convertirse en una cena completa, rápida y nutritiva. Dentro de estas opciones destaca el Tamago Sando, el sándwich japonés de huevo que ha pasado de ser un clásico de la comida callejera nipona a un fenómeno internacional.
Se prepara en apenas doce minutos y tiene como protagonista absoluto al huevo, presente en distintas texturas. La receta combina ensalada de huevo, un toque de mayonesa y un huevo cocido con la yema cremosa que queda en el centro, ofreciendo un relleno sencillo pero muy característico. Tradicionalmente se sirve con pan de molde japonés, conocido como 'shokupan', aunque puede elaborarse con pan integral o pan de molde común.
Receta
Ingredientes
- 400gr de calabaza troceada
- 1 bloque de queso feta
- 250gr de pasta
- 3 ramas de romero fresco
- 1 cucharadita de pimentón dulce
- Aceite de oliva
- Sal
- Pimienta
Elaboración
Colocar la calabaza y el queso feta
Cogemos los 400 gramos de calabaza troceada a cuadrados y el bloque de queso feta completo. Lo ponemos en una bandeja apta para horno, colocando el queso en el centro y rodeando lo con los trozos de calabaza.
Salpimentamos
Cuando ya lo tengas todo colocado en la bandeja, le echas un buen chorro de aceite y una pizca de sal, pimienta y pimentón rojo
Colocar el romero
Una vez hayas salpimentado la bandeja, le añades por encima las tres o cuatro (según el gusto personal) ramas de romero que tenías preparadas.
¡Al horno!
Un vez preparado todo, lo metes al horno unos 30 minutos a 200 grados
Preparación de la pasta
Mientras la salsa de calabaza y queso feta se encuentra en el horno, añades la pasta en una cacerola con agua hirviendo y lo que dejas unos 10 minutos para que quede al dente
Prepara la salsa
Una vez pasada la media hora, saca la bandeja del horno. Retira las ramas de romero y empieza a mezclar todos los ingredientes. La calabaza debe quedar tan tierna que no supondrá ningún problema machacarla junto con el queso.
Sirve en el plato
Añade la pasta que desees en un plato y por encima cúbrelo con la salsa de calabaza y queso feta que acabas de machacar. Añade un par de hojitas de las ramas de romero que has horneado y ¡listo!
Un sándwich alto de proteínas
El principal valor del Tamago Sando está en el aporte nutricional de los huevos, considerados la referencia en cuanto a proteínas de alto valor biológico. Estas proteínas resultan esenciales para la recuperación muscular y el mantenimiento de tejidos, lo que convierte a este sándwich en una alternativa adecuada para una cena ligera.
Además de proteínas, los huevos ofrecen vitaminas del grupo B, vitamina D y minerales como hierro, fósforo y selenio, nutrientes clave para el metabolismo y el sistema inmunitario. La combinación con pequeñas cantidades de mayonesa y yogur aporta cremosidad al relleno sin comprometer el equilibrio nutricional, siempre que se utilice en proporciones moderadas.

La elección del pan también marca la diferencia: el 'shokupan' aporta suavidad, pero si se opta por pan integral se suma un extra de fibra dietética, que ayuda a la saciedad y a la regulación del tránsito intestinal. Con estas variantes, el Tamago Sando se adapta fácilmente a distintos estilos de alimentación.
De receta tradicional a fenómeno viral
Más allá de sus beneficios nutricionales, el Tamago Sando se ha convertido en un fenómeno viral gracias a su estética y simplicidad. Las redes sociales, especialmente TikTok e Instagram, están llenas de vídeos en los que se muestra el contraste entre el pan blanco y el relleno amarillo intenso, lo que lo ha transformado en un plato muy compartido.
Su éxito se explica en parte porque responde a la tendencia de recetas rápidas con pocos ingredientes, pero con un resultado visualmente atractivo. Además, chefs y aficionados lo han reinterpretado con variaciones: algunos añaden aguacate, otros lo combinan con salsas picantes, y en cafeterías de todo el mundo ya se ofrecen versiones del Tamago Sando como alternativa al clásico sándwich de atún o pollo. Así, este sencillo bocadillo japonés ha pasado de ser un recurso callejero en Tokio a un icono gastronómico global que une nutrición, rapidez y viralidad en un solo bocado.