Alina Boz y Umut Evirgen siguen en el punto de mira de la prensa. Aunque hace unas semanas la actriz negaba que hubiera habido pedida de mano en París y que su pareja y ella no tenían planes de boda, los medios turcos no le han dado credibilidad a estas declaraciones e insisten en que la pareja sí va a contraer matrimonio y lo hará en las próximas semanas.
La pareja, que hizo público su romance el pasado mes de julio, se ha convertido en una de las más perseguidas por la prensa turca. Su amor pilló por sorpresa a todos los fans de la actriz, que acababa de terminar su relación con el músico Mithat Can Özer después de casi cinco años juntos. Eso unido a que él es considerado todo un rompecorazones y que ha mantenido romances con rostros tan conocidos como Tuba Büyüküstün ('Sühan') o Melisa Şenolsun ('Te alquilo mi amor')les convertían en la pareja más buscada del verano en su país. Y desde entonces, cada movimiento que hacen es noticia. El romance, que va viento en popa, ha copado las portadas de todos los medios, que han insistido en que la pareja va camino al altar.
A pesar de ese desmentido de la protagonista de 'No sueltes mi mano', que para la prensa no ha sido más que una forma de desviar la atención para poder seguir con los preparados, los medios turcos han asegurado en los últimos días que la pareja se casará a finales de noviembre en una ceremonia en casa y en familia. Según parece, Umut Evirgen ha aceptado todas las condiciones impuestas por la novia, a la que no le gusta la ostentación y prefiere una celebración sencilla y muy íntima.
Y una vez que convertidos en marido y mujer, la pareja tiene planeado viajar de luna de miel al extranjero. La prensa aún desconoce el destino elegido por la pareja para empezar su nueva vida juntos, pero todo apunta a que disfrutarán de un largo tiempo de relax tras seis meses de apasionado e intenso romance y organizar una boda en tiempo récord.
A la espera de que se confirme el paso por el altar de la pareja, las declaraciones de Alina Boz el día que desmintió su enlace cobra hoy una nueva dimensión. Y es que, si no tenía intención de darle el 'sí, quiero' a su pareja, ¿por qué pidió no hablar de la boda para no gafarla? La actriz eludía la preguntas de los periodistas, se mostraba inquieta y demostraba ser muy supersticiosa al respecto. "En cosas buenas como esa, no hay que dejar que el mal de ojo lo toque. Sí, es algo que está escrito, pero hablar puede atraer el mal de ojo", decía entonces la actriz. ¿Negó la boda para evitar que algo saliera mal?