Así ha sido el reencuentro de Melanie Griffith y Antonio Banderas y la cena familiar con su hija Stella
Antonio Banderas y Melanie Griffith se han reunido para cenar con su hija horas antes de su preboda y futuro enlace matrimonial
Stella Banderas se casa en Sardón de Duero, Valladolid: el motivo por el que ha decidido este lugar de España
Faltan muy pocas horas para el acontecimiento que tiene en vilo a la localidad de Sardón de Duero, ubicada en Valladolid, donde los vecinos están expectantes por la llegada de una gran oleada de famosos y rostros internacionales para la boda de Stella Banderas y Alex Gruszynski que será celebrada en el monasterio cisterciense de esta localidad que es considerado uno de los mejor conservados de Europa, y la preboda que se llevará a cabo esta misma noche junto a algunos de sus invitados. Sin embargo, Antonio Banderas y Melanie Griffith ya están en España y se han podido reunir con su hija para tener una noche familiar.
¿Cómo ha sido el reencuentro de Melanie y Antonio Banderas y la cena familiar?
El equipo de ‘El tiempo justo’ ha podido contactar con un testigo que estuvo presente cuando se produjo la cena familiar en un restaurante en el que, hasta que no reconoció al actor de Málaga, no eran conscientes de que este encuentro se estaba produciendo: “Nos llamó mucho la atención una mesa redonda. Estaban todos sentados, muy tranquilos, y en un momento dado se levantaron. Le escuché el tono de voz y dije: ese va a ser Antonio Banderas. Cuando lo confirmé, no me lo podía creer”, admite sorprendido. Según el testigo, Antonio llegó en un coche privado y sin la compañía de su actual pareja, Nicole Kimpel, y fue dentro del establecimiento donde se reencontró con la que fue su mujer durante 18 años, aunque su relación se alargó hasta las dos décadas.
El orgulloso padrino de la futura boda está “encantado” con el enlace de su hija y se mostró de lo más cariñoso con ella durante la cena: “Estaba sentado enfrente de su hija, no a su lado. Antes de irse, se levantó, se acercó a ella y se dieron un abrazo muy cariñoso. Se notaba que era un momento especial, de esos que emocionan incluso a los que lo ven de lejos”.
Antonio fue el encargado de pagar la cena del restaurante con estrella Michelin: “El futuro yerno se adelantó para pagar y los camareros le bromearon diciendo: alguien se nos ha adelantado. Fue un detalle muy bonito”, explicaba el testigo.
Este reencuentro familiar ha servido como preludio a la preboda que tendrán los novios junto a sus más allegados, y se produjo en un entorno emotivo y “muy familiar y discreto”: “Fue una reunión íntima, elegante, muy de película. Se respiraba emoción, orgullo y muchas ganas de celebrar”.