La faceta menos conocida de Robe Iniesta: era abuelo de una nieta, Iris, a los sesenta y tres años
Pese a que su familia siempre se ha mantenido lejos del foco, ha salido a la luz que el músico tenía, a los sesenta y tres años, una nieta
Descubrimos la vida de Nahún y Karín, los dos discretos hijos de Robe Iniesta: de sus trabajos a su relación con su padre
Continúan los homenajes y despedidas a la figura de Robe Iniesta desde que el pasado miércoles de madrugada se confirmase que había muerto a los sesenta y tres años, por causas que todavía no han sido confirmadas y un año después de haberse retirado de los escenarios a causa de un tromboembolismo pulmonar. La triste noticia, una pérdida inconmensurable para el mundo de la música y la cultura españolas, ha puesto el foco en la carrera artística del líder de Extremoduro, pero también en su esfera personal y en su familia. Esa que incluye una poco conocida faceta como abuelo de una nieta.
Lo que se sabe sobre la muerte de Robe y su despedida
Tras la cancelación de su última gira a finales de 2024, este pasado verano su salud empezó a deteriorarse y se había reducido mucho su presencia pública. Este 10 de diciembre ha fallecido en el Hospital de Cruces de Bilbao, ya que era en Lezama, un pueblo de la provincia de Bizkaia, donde tenía fijada su residencia junto a los suyos. Como revela El Diario Vasco, tras su muerte y posterior incineración, sus parientes trasladan sus restos mortales a su ciudad natal, Plasencia, en Cáceres, donde el domingo 14 de diciembre tendrá lugar un homenaje póstumo para despedir al cantante, músico y poeta, a quien en estos días se ha definido como el "maestro de maestros".
La vida de Iniesta se repartía entre País Vasco y Extremadura, entre su música, sus proyectos lejos de los escenarios y los suyos. Siempre discretos, los miembros del círculo más íntimo y personal del autor de temas como 'Si te vas', 'So payaso' o 'La vereda de la puerta de atrás' se pronunciaron en una emotiva carta de despedida, publicada en la web y las redes sociales del artista, dando cuenta del estrecho vínculo existente entre ellos. Su familia incluye, como se ha destacado estos días, a su pareja, Bibi Vázquez, y los dos hijos que tuvo con ella, Nahún y Karín Moebius Iniesta Vázquez.
Robe Iniesta era abuelo de una niña llamada Iris
Hay, no obstante, otro miembro de ese clan Iniesta Vázquez del que apenas ha habido referencias en estos días en los que el interés mediático ha apuntado, también, a la vida personal del extremeño. Además de marido y padre, Robe era también abuelo. Una faceta prácticamente desconocida hasta ahora, que ha revelado el diario Hoy en estos días posteriores a su muerte. El fundador de Extremoduro tenía una nieta, sobre la que se conocen un par de detalles. De acuerdo a la información de dicho diario, la niña se llama Iris y es hija de su hijo pequeño, Karín, que actualmente, y según otros medios de comunicación, tendría unos veintiocho años.
Lo cierto es que no hay referencias públicas por parte de Robe esta faceta como abuelo de Iris. En su última entrevista, concedida al diario Hoy, sí hablaba no obstante sobre la infancia y los niños pequeños, al ser preguntado por la decisión de algunos padres de llevar a sus descendientes a sus conciertos. "No le veo mucho sentido a ir con críos tan chicos. Creo que son conciertos para adultos y los críos a esas edades están mejor tirando piedras o haciendo cosas de críos", contaba entonces.
Así fueron los últimos meses de Robe Iniesta
Con el paso de los días se han conocido algunos detalles de estos últimos meses de vida de Robe. Un papel destacado tuvo en este tiempo su familia, que siempre se ha mantenido siempre en un segundo plano, De ella formaban parte su mujer Bibi, natural de Plasencia también como él y que fue un gran apoyo en las épocas difíciles; su primogénito, Nahún, que ha seguido la vertiente artística de su progenitor como baterista, además de estudiar Fisioterapia; y el benjamín del clan, Karín, vinculado a su último proyecto lejos de la música.
Robe detuvo sus conciertos y siguió las recomendaciones de los médicos, que le instaban a llevar una vida tranquila, pese a que su salud era ya delicada, como recoge Vanitatis. Los meses pasaron entre Lezama y Plasencia, volcado en el mencionado proyecto de agroturismo que había ideado para la finca El Goterón, en la provincia de Cáceres, que había recibid luz verde administrativamente. En este tiempo, además, se han seguido algunos reconocimientos a su trayectoria, como una avenida a su nombre en su ciudad natal, además de colaborar en una canción de Leiva, 'Caída libre'.