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Han pasado más de siete años desde que Raquel del Rosario decidió abandonar su carrera música en ‘El Sueño de Morfeo’ para centrarse en su vida privada. Había conocido a Pedro Castro, con quién tiempo después se dio el ‘sí, quiero’ en una íntima ceremonia que solo ellos presenciaron. Tras su boda, la pareja decidió formar una familia. Primero nació Leo, el ‘niño hada’ al que diagnosticaron TAELeoTAE (Trastorno del Espectro Autista). Y dos años más tarde nació Mael, el pequeño de la familia.
A lo largo de estos años, Raquel del Rosario y Pedro Castro han contado algunos secretos de su relación. Y hace tan solo unos días, el director de fotografía utilizaba sus redes sociales para confesar que no es algo fácil y que cada día luchan por mantener su matrimonio a flote: “¡Nosotros 2.0! Transcendiendo miedos por separado para así crear más amor juntos. Agradecido por el ángel que apareció en nuestras vidas para demostrarnos que nuestra luz se estaba apagando”.
Días después de aquella confesión, la cantante ha recurrido también a su perfil de Instagram para sincerarse y expresar cómo se encuentra. “Hace algo más de un mes le pedía al universo que ordenase las cosas, algo que suelo hacer cuando no sé muy bien cómo manejarlas, como afrontar determinadas situaciones, acontecimientos, sentimientos, etc.”, cuenta.
Raquel del Rosario ha explicado que esto es una forma de rendirse y entregarse a lo que es, enfocando su energía e intención en “atraer lo mejor” para su aprendizaje y evolución. “Pero a menudo se me olvida que lograr un orden requiere de muchos movimientos. Cuando algo se mueve, se modifica, aparece o desaparece, provoca una sacudida en otro lugar”, añade.
La cantante ha contado que, para ella, agosto ha sido un mes de “completar muchas líneas otra vez” con la sacudida correspondiente. “La vida tiene una peculiar forma de mostrarnos y recordarnos las cosas, y no siempre lo hace de la forma más agradable”, admite. “Pero si algo tengo claro es que ahora me encuentro aquí, en este momento que es lo único que existe, tratando de llevar a cabo mi mejor manera, mi misión en este mundo, al que cada vez me cuesta más comprender, pero al que no puedo evitar amar con todo mi ser”, ha confesado.