Adiós a la congestión nasal: cómo destapar la nariz al instante

Ya sea por un resfriado, por una gripe o por la típica alergia primaveral, tarde o temprano todos acabamos con la nariz congestionada un par de veces al año. Aunque no se trata de algo grave, sí es muy molesto, y si no se resuelve a tiempo puede desembocar en problemas más graves como una sinusitis, una apnea obstructiva del sueño o una otitis. Te contamos cómo destapar la nariz al instante con estos eficaces remedios. Y si con ellos no consigues mejorar, no dudes en acudir al médico. 

Bebe líquido

Esta recomendación es la más importante. Los líquidos ayudan a diluir las secreciones nasales y a aliviar, por lo tanto, la congestión. El agua es la mejor bebida, sin lugar a dudas, como también los son las infusiones. Prueba a hacerlas con hierbas que te ayuden a descongestionante, como la echinacea o el jengibre. Del mismo modo, una taza de caldo caliente, de pollo o verduras, te será de gran ayuda. 

Lavados con suero fisiológico

Los lavados nasales con suero son doblemente eficaces, ya que movilizan y diluyen las mucosas que obstruyen los orificios nasales, al tiempo que la sal que contiene funciona como antiséptico. También puedes utilizar un spray de farmacia que contenga una solución salina con un dosificador especial para la nariz. 

El vapor

El vapor es todo un clásico para descongestionar la nariz ya que es muy eficaz a la hora de abrir las vías respiratorias altas y favorecer la expulsión de la mucosa. Solo tienes que poner a hervir agua en una cacerola y cuando la retires del fuego, cúbrete la cabeza con una toalla e inhala el vapor. Puedes añadir al agua un poco de aceite esencial de menta o eucalipto para que sea más efectivo.

Pon un humidificador en casa

Si tu casa tiene una humedad relativa inferior a la recomendable, es decir, de un 40% o menos, seguro que un humidificador te ayuda a que, en general, puedas respirar mejor. Si no es así, pero tienes uno de estos aparatos, utilízalo solo cuando estés congestionada. Si no tienes ninguno y tu casa no lo necesita, el resto de remedios pueden ayudarte sin que tengas que hacer ningún gasto extra. 

Date un ducha

Sabemos que las duchas deben ser breves y, a ser posible, con el agua no muy caliente. Pero si tienes la nariz congestionada, puedes concederte un tiempo extra con agua caliente para que el vapor te ayude a acabar con las mucosidades y las molestias. Y si tu congestión es debida a una alergia, además te servirá para librarte de los restos de polen que se hayan quedado en tu cuerpo. 

Un plato con cebolla picada

Seguro que ya conocías este remedio para aliviar la tos seca y persistente. Pues es igual de eficaz con la congestión nasal. La razón es que la cebolla, cuando está recién picada, contribuye a que se mantenga la humedad en el ambiente y puedas respirar mejor.