A cada escote su sujetador: maneras infalibles para que no se vea

  • No hay nada peor que que se vea el sujetador por tu vestido de fiesta, pero es uno de los errores más comunes

  • Con estas claves vas a poder dar con el sujetador perfecto sea cual sea el diseño del vestido que vayas a lucir

Da igual lo maravilloso que sea un vestido, este se arruina en cuanto se ve el sujetador. Y es que, especialmente los escotes de los vestidos de fiesta son realmente difíciles de llevar sin que ocurran este tipo de accidentes con el sujetador. Para que esto no ocurra, la opción que mejor nos lo garantiza es la de no llevar ningún tipo de sujetador. Pero esto no siempre nos convence.

A muchas no les es cómodo ir sin sujetador o no les convence cómo quedan estas prendas sin el refuerzo de esta prenda íntima. Pero, a pesar de que muchas otras ya se hayan apuntado a este truco porque es como más a gusto se sienten, no es a lo que todas tienen que resignarse. No, no es el único truco para que estos vestidos queden bien y no se vea el sujetador. De hecho, el secreto pasa por encontrar cuál es el que mejor le corresponde a cada tipo de escote. Algo que parece muy obvio pero que a la hora de la verdad no lo es tanto.

Por eso, ahora que se acerca la temporada BBC (de bodas, bautizos y comuniones), hemos decidido hacer una pequeña guía para que puedas dar con el sujetador exacto que se corresponde con el vestido que tienes planeado llevar al evento. Y si todavía no lo has encontrado, facilitarte la decisión en función del sujetador que no solo sea más adecuado para el vestido, sino también cómodo para ti, renunciando a los diseños que te resulten imposibles o que menos se ajustan a tu silueta. Sí, cada tipo de escote, pero nosotras también tenemos los nuestros (y no solo por lo que se refiere a la talla).

Lo primero, calcular la talla de sujetador

calcular la talla de sujetadorAntes de entrar en materia sobre qué sujetador es más o menos adecuado para cada escote, lo necesario será elegir nuestra talla de sujetador correcta. Una talla de sujetador equivocada no solo afectará al diseño del vestido marcándose o saliéndose, por ejemplo, por la sisa del vestido, del mono o del top elegido, sino que además traerá problemas para nuestra espalda y pecho.

Para elegir la talla de sujetador adecuada, primero hay que medir la talla en sí, es decir, el contorno por debajo del pecho, que mediremos con la cinta métrica y a esa medida le añadiremos 15 centímetros más. Una vez se tenga esa medida, se calcula la copa. Para ello, colocamos el metro alrededor del pecho, a la altura del pezón. Respiramos profundamente hasta que el metro caiga en el punto donde, aunque apriete, nos sintamos cómodas.

Después habrá que comprobar que el sujetador se ajuste. La banda o parte ajustada a las costillas debe quedar lisa y que entre la tela y el cuerpo quepan dos dedos. En el centro, debe quedar ajustado al esternón pero sin clavarse. Además, la copa debe quedar totalmente llena y el sujetador debe poder abrocharse en la primera o segunda clavija. En el caso de que el sujetador lleve tirantes, estos deben quedar encima de los hombros, ajustados pero dejando que quepan dos dedos.

Cuello halter

A pesar de ser una especie de cuello alto, este escote se cierra en diagonal alrededor del cuello, dejando ver gran parte de los hombros y, por tanto, si llevamos un sujetador con tirantes también quedarán al descubierto. La mejor opción es apostar por un sujetador multiposición, que pueda cruzarse en la espalda, ya que un sujetador sin tirantes puede marcarse en la zona del pecho.

Este escote, por su parte, quedará especialmente bien con el pecho pequeño, por lo que se recomienda apostar si tienes mucho pecho por un sujetado reductor que no haga tan ajustado el cuerpo del vestido, mono o top.

Palabra de honor, escote corazón o escote barco

Todos estos escotes se caracterizan por dejar los hombros o parte de ellos totalmente al descubierto con lo que se verán seguro los tirantes e incluso parte del sujetador. Lo ideal será apostar por un sujetador estilo sin tirantes y de estilo balconet, que se sujete sobre el torso.

Sujetador para la espalda descubierta

La mejor idea para llevar piezas con la espalda descubierta o de escote asimétrico es prescindir del sujetador, ya que este “escote” lleva implícito también ese side-boob que dejaba ver el lateral del pecho. Pero si esto no fuera posible, de nuevo volveremos a recurrir a ese transparente y de silicona que eleva ligeramente el pecho y hacen de pezonera. Eso sí, no es una opción de lo más cómoda… Esto mismo ocurre también con los escotes en “v” muy pronunciados.

Escote lágrima

Este escote también se cierra en el cuello pero está abierto justo en el medio y a la altura del pecho por lo que, aunque sea pronunciado, el sujetador no tiene por qué verse. Eso sí, no deberemos poner el sujetador demasiado alto para que no se vea el centro y, por supuesto huir de sujetadores estilo bralette y balconet. Recurriremos en este caso a los push up, para dar forma al pecho.