Recetas de crepes para todos los gustos: la tradicional, opción sin gluten y para veganos

Los crepes son originarios de Francia y ahora son un plato típico en un brunch, una merienda o desayuno
Puedes optar tanto por la receta tradicional como por la receta apto para celíacos o veganos y rellenarlos de los que más te guste
Los crepes, originarios de la región de Bretaña, en Francia, son un plato que ha conquistado paladares a lo largo de los siglos. Su fina textura y versatilidad los han convertido en un básico de la gastronomía mundial, perfectos tanto para recetas dulces como saladas. Según cuenta la historia, surgieron en la Edad Media como una solución práctica para aprovechar la harina y los ingredientes disponibles. Inicialmente elaborados con trigo sarraceno, su preparación se expandió y evolucionó, adaptándose a las tradiciones culinarias de cada lugar. Hoy en día, los crepes son sinónimo de celebraciones, meriendas en familia o cenas rápidas y deliciosas.

Beneficios de los crepes
Aunque pueden parecer un capricho, los crepes son una base nutritiva que puede adaptarse a dietas saludables. Dependiendo de los ingredientes, pueden ser una fuente de energía, proteínas y fibra. Por ejemplo, si usamos harinas integrales o sin gluten aumentamos el aporte de fibra, mientras que opciones veganas reducen el contenido de grasas animales. Además, cuando los acompañamos de frutas, verduras o fuentes de proteínas se convierten en una opción equilibrada para cualquier momento del día.
Qué necesitamos
Para preparar crepes necesitarás una sartén antiadherente, un cucharón para verter la masa y una espátula para darles la vuelta. También es útil un bol para mezclar los ingredientes y unas varillas manuales o eléctricas para obtener una masa sin grumos.
La receta clásica de crepes:
● Ingredientes: 250 g de harina de trigo, 500 ml de leche, 2 huevos, 1 cucharada de azúcar (opcional), 1 pizca de sal, 1 cucharada de mantequilla derretida o aceite.
● Preparación: En un bol grande, mezcla la harina con la pizca de sal y, si prefieres, el azúcar. Haz un hueco en el centro y añade los huevos, batiendo mientras incorporas lentamente la leche para evitar grumos. Finalmente, agrega la mantequilla derretida o el aceite. Deja reposar la masa durante 30 minutos. Calienta una sartén antiadherente a fuego medio y engrásala ligeramente. Vierte un cucharón de masa y extiéndela girando la sartén. Cocina el crepe durante 1-2 minutos por cada lado hasta que esté dorado. Repite el proceso con el resto de la masa.

Crepes de trigo sarraceno (sin gluten):
● Ingredientes: 250 g de harina de trigo sarraceno, 500 ml de agua fría, 1 huevo (opcional, para mejorar la textura), 1 pizca de sal, 1 cucharada de aceite de oliva.
● Preparación: En un bol grande, mezcla la harina de trigo sarraceno con la sal. Añade poco a poco el agua fría mientras bates para obtener una masa homogénea. Si utilizas huevo, incorpóralo ahora y mezcla bien. Agrega el aceite y deja reposar la masa durante al menos 1 hora, preferiblemente en la nevera, para que la harina absorba el líquido. Calienta una sartén antiadherente a fuego medio, engrásala ligeramente con aceite y vierte un cucharón de masa, extendiéndola rápidamente para que quede fina. Cocina durante 1-2 minutos por cada lado hasta que los bordes estén dorados. Estos crepes tienen un sabor terroso y una textura robusta, perfectos para recetas saladas como el clásico "galette complète", relleno de jamón, queso y huevo.
Crepes veganos:
● Ingredientes: 200 g de harina de trigo (puedes usar harina integral), 400 ml de bebida vegetal (como leche de avena o almendra), 1 cucharada de aceite de coco o girasol, 1 cucharada de azúcar (opcional), 1 pizca de sal.
● Preparación: En un bol, mezcla la harina con la sal y el azúcar si lo deseas. Añade el aceite de coco y la bebida vegetal, batiendo hasta obtener una masa homogénea. Deja reposar durante 20-30 minutos. Cocina los crepes en una sartén antiadherente ligeramente engrasada, asegurándote de que queden finos y dorados. Estos crepes son ideales para quienes buscan una alternativa vegana sin renunciar al sabor.

La magia de los crepes está en su versatilidad. En su versión dulce, puedes acompañarlos con frutas frescas, miel, chocolate, mermelada o incluso un toque de canela. Si prefieres opciones saladas, rellénalos con queso, espinacas, jamón o setas salteadas. También son una base perfecta para improvisar cenas rápidas: prueba a rellenarlos con guacamole y verduras o con hummus y tofu.
Los crepes también son ideales para ocasiones especiales. En Francia, el Día de la Candelaria es sinónimo de disfrutar crepes en familia, mientras que en otros lugares se han convertido en protagonistas de desayunos y brunches. Ya sea que los prefieras clásicos, sin gluten o veganos, los crepes siempre son una opción deliciosa y adaptable para cualquier momento del día.